La crispación política impide el Pacto por la Sanidad que avala la sociedad

Las elecciones generales del 23 de julio traen consigo numerosas reflexiones que abordan el estado actual de la economía española y la situación sanitaria. Un ejemplo es el artículo que escribe Alfonso Novales, de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas del Instituto Complutense de Análisis Económico (ICAE), en la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) y donde analiza los motivos que dificultan alcanzar pactos en sanidad.

Novales asegura que "la crispación ha presidido las relaciones entre los grupos políticos parlamentarios en los últimos años", lo que ha impedido lograr acuerdos y pactos "que contarían fácilmente con apoyo mayoritario de los ciudadanos", como la sanidad, la educación y las pensiones. Bajo su criterio, los partidos políticos renuncian a respaldar una propuesta "simplemente porque proviene de un partido de signo opuesto, incluso si la propuesta pudiera resultarle aceptable y necesaria para el bienestar social".

El autor apunta que en este contexto "no es sorprendente que los ciudadanos no se sientan representados por aquellos a quienes eligió para que lo hicieron". Es más, "estas actitudes chocan de frente con la llamada que antes hicimos a que el ciudadano y su bienestar estén en el centro de la gestión pública", incide en su análisis de cómo está la economía española.

Acuerdos para afrontar la pandemia

Novales remarca que la crispación política se ha transmitido a la sociedad, al erigirse los políticos "con gusto" en protagonistas mediáticos y ser aceptado por los ciudadanos. "Las opiniones extremas que los políticos defienden en sus confrontaciones son asumidas por los ciudadanos para generar enfrentamientos personales que nunca debieran producirse; lo contrario de lo que un país necesita para enfrentarse a los importantes retos que tienen delante de sí", como, por ejemplo, "una crisis sanitaria como la vivida en 2020", haciendo mención a la pandemia de Covid-19. También hace referencia al impacto que tuvo este acontecimiento sobre la economía y la vida con las personas, e identifica como desafíos los importantes cambios tecnológicos, o los efectos del cambio climático, "otra enorme crisis sobre la que debiéramos estar actuando de manera mucho más decisiva".

Sobre la pandemia, Novales hace hincapié en que desde el sector público "se puede y se debe hacer mucha pedagogía", que enseñe a hacer un buen uso de los servicios públicos, lo que, unido a otros factores, restablecería la confianza de los ciudadanos en sus representantes. Esta cuestión es "muy necesaria", según el autor, porque la evidencia disponible muestra que, en los países donde la confianza en las instituciones y en los políticos es mayor, la política es más eficaz, "lo que se ha constatado en la actual crisis sanitaria". En estos casos los gobiernos "gozan de mayor credibilidad, y los ciudadanos aceptan las normas que se les imponen con un elevado grado de cumplimiento de las mismas".