Durante décadas, España ha presumido de tener uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo. Sin embargo, los datos elaborados por la Oficina Europea de Estadística, más conocida como Eurostat, revelan que la inversión española en sanidad se encuentra por debajo de la mayoría de los 27 países que componen la Unión. De hecho, hasta un total de 17 estados invierten más recursos, incluidos algunos con una menor economía y peso político como Eslovenia, Eslovaquia o Islandia.
De media, las naciones del Viejo Continente han destinado durante el 2019, última año del que se dispone de estadísticas oficiales, el 7 por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB) a sufragar sus servicios sanitario. En España, este porcentaje se sitúa en el 6,1 por ciento, si bien es cierto que el dato es aún provisional. Si bien es cierto que sube un 0,1 por ciento respecto al 2018, se encuentra todavía a casi un punto porcentual respecto al conjunto de sus vecinos.
El país europeo que más apostado por la sanidad ha sido Noruega con un 8,7 por ciento. El resto de países que destinan recursos por encima del suelo del 8 por ciento son Dinamarca, Francia y Austria. En el vagón de cola se sitúa Suiza (si bien no forma parte de la UE) con un 2,1 por ciento, y le siguen Chipre (4 por ciento) y Letonia (4,2 por ciento).
Datos generales
En 2019, el gasto público total en la UE ascendió al 46,6 por ciento del PIB. Esta proporción se mantuvo sin cambios con respecto al año anterior, sin embargo, ha disminuido constantemente desde su último pico en 2009 (50,7 por ciento del PIB).
Entre las principales funciones del gasto de las administraciones públicas en la UE, se encuentra la protección social, que fue, con mucho, el gasto más importante en 2019, equivalente al 19,3 por ciento del PIB. Las siguientes áreas más importantes fueron sanidad (7,0 por ciento), servicios públicos generales (5,8 por ciento) como asuntos externos y transacciones de deuda pública, educación (4,7 por ciento) y asuntos económicos (4,4 por ciento). Las funciones orden público y seguridad (1,7 por ciento), defensa y recreación, cultura y religión (ambas 1,2 por ciento), protección del medio ambiente (0,8 por ciento) y vivienda y servicios comunitarios (0,6 por ciento) pesos más limitados.
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