La
Comisión Europea ha diseñado una
prueba piloto para testar nuevas vías de
formación de los profesionales de la salud enfocadas a obtener habilidades
digitales y verdes. El órgano de gobierno del bloque comunitario ha colocado esta medida como una de las potenciales soluciones a
la crisis laboral que atraviesa el grupo de los 27 como consecuencia de las dificultades para encontrar
perfiles cualificados en la sanidad, que cubran la fuerte demanda de trabajadores.
Fuentes del área de Empleo de la institución han apuntado a
Redacción Médica que estos nuevos programas estarán dirigidos a avanzar hacia una
cultura del aprendizaje “prolongada” durante toda la carrera laboral de los profesionales, en la que se garantizará además el “diálogo” con los propios sanitarios.
“Tendrá como objetivo abordar las disparidades entre los sistemas de salud y formativos”, han subrayado.
La iniciativa se enmarcará como parte de la alianza
Health Large-Scale Skills Partnership, encargada de implementar la estrategia europea de habilidades para el personal sanitario. Entre sus metas también figura la de crear
planes de estudios y programas formativos a nivel europeo que mejoren las capacidades del sector de los cuidados a largo plazo.
La alianza está conformada por las denominadas
“asociaciones de habilidades a gran escala”, integradas por diferentes actores como las organizaciones del sector, las autoridades públicas relevantes o las
empresas de la sanidad privada. Todas deberán “cooperar e invertir para brindar oportunidades de mejora y reciclaje de habilidades”, según el plan trazado por Bruselas.
Europa busca formar a casi 4 millones de sanitarios
El objetivo fijado por la alianza pasa por ofrecer formación al menos al 6
0 por ciento de los sanitarios que se dedican actualmente a las actividades de
cuidados de larga duración, entre los que encajan las residencias de la tercera edad, los centros de personas con discapacidad o los hospitales para pacientes crónicos. Según sus estimaciones hay más de
6,3 millones de profesionales de la salud dedicados a estas tareas, lo que obligaría a dar clases al menos para
3,8 millones cada curso.
Bruselas ha diseñado esta medida como una de las patas para reformar el actual funcionamiento de la sanidad en los países miembros, junto con otra serie de propuestas. Entre las medidas adicionales destaca e
l Fondo Social Europeo Plus (FSE+), dotado con un presupuesto de
99.000 millones de euros hasta 2027, en el que se podrán incluir la financiación de políticas de empleo en el ámbito sanitario. O los 40.000 millones ligados al
Mecanismo de Recuperación y Resiliencia que también incluyen partidas para la inversión en recursos humanos en el campo de la salud.
“Se trata de una inversión importante que puede marcar una diferencia real y muestra claramente que la salud es una prioridad en la Unión Europea”, han insistido las fuentes consultadas por este periódico.
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