El invierno es una época desafiante para las vías respiratorias en general y para la garganta en particular. Esto se debe a los cambios de temperatura, el aire seco y las infecciones comunes, como resfriados y gripes. Mantener una garganta saludable durante esta época es crucial para evitar molestias y posibles enfermedades más graves.
Si quieres prevenir o remediar cualquier afección en tu garganta, sigue leyendo. Aquí te traemos algunas estrategias efectivas para el
cuidado óptimo de tu garganta en invierno. Seguro que poniéndolas en práctica notas la diferencia con años anteriores.
Los mejores consejos para mantener sana tu garganta
Airea las habitaciones
Ventilar nuestro hogar es muy importante para que renovar el aire. De esta manera evitaremos la acumulación de bacterias y otros agentes perjudiciales para el organismo. En invierno, el mejor momento para hacerlo es por la mañana, pero tampoco es necesario dejar las ventanas abiertas más de 5 minutos.
Hidratación constante
Las bajas temperaturas suelen resecar la garganta, por eso es necesario beber mucha agua. Bebiendo al menos dos litros de agua al día mantendrás tus mucosas hidratadas.
Gárgaras con agua salada
Las gárgaras con agua tibia y sal son muy eficaces para aliviar la irritación y reducir la inflamación de la garganta. Este método casero puede eliminar las bacterias y disminuir la mucosidad, aunque el efecto no dura mucho tiempo.
Consumo de líquidos
Cuando hay dolor de garganta hay que evitar tomar los alimentos muy calientes o fríos, por eso lo mejor son las infusiones tibias y los caldos de pollo. Este tipo de líquidos son muy reconfortantes, sobre todo si a las infusiones les añades un poco de miel y limón.
Evita el tabaco
Fumar es muy perjudicial para la garganta, sobre todo cuando ya la tienes irritada. Si no fumas debes evitar ambientes muy cargados de humo.
Uso de bufandas
Para salir a la calle en los meses de más frío, lo mejor es que uses un pañuelo o bufanda que te cubra el cuello. De esta manera estará menos expuesta y la mantendrás protegida del frío y el viento.
Mantener una buena higiene
Una rutina de higiene es fundamental para evitar contagios y prevenir que los gérmenes se propaguen. Intenta no tocarte la nariz, ojos y boca cuando tengas las manos sucias y lávalas con regularidad. También puedes usar un gel hidroalcohólico cuando no tengas acceso a un lavabo.
Reposo vocal
Además de la garganta, es posible que notes como tus cuerdas vocales también están afectadas. Para que mejoren lo mejor es que evites forzarlas hablando en lugares ruidosos.
Dieta equilibrada
Una buena alimentación es clave para tener una garganta sana en invierno. Consume a diario frutas y verduras, ya que son una excelente fuente de vitamina C. Estos alimentos, además, contribuyen a que refuerces tu sistema inmunológico, que es la primera barrera para frenar las infecciones.
Si sigues estos conejos, puedes cuidar tu garganta durante el invierno, manteniéndola saludable y protegiéndola de posibles molestias o enfermedades. Si a pesar de ello experimentas un fuerte dolor de garganta, fiebre alta o dificultad para tragar, es importante buscar atención médica.
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