España necesita unidades de atención temprana de la esquizofrenia

Está demostrada su coste-eficiencia para las arcas públicas a largo plazo

Lunes, 01 de febrero de 2016, a las 10:25
Redacción. Madrid
El Plan de Acción en Salud Mental de la Organización Mundial de la Salud (OMS) 2013-2020 incluye, entre sus retos, el diagnóstico precoz de la esquizofrenia, ya que está demostrada su coste-eficiencia para las arcas públicas a largo plazo.

Celso Arango. 

España ha de trabajar para estrechar el cerco de la detección precoz y tratamiento adecuados de la enfermedad, que afecta a 400.000 de sus ciudadanos y se asocia a la productividad laboral y a la economía del país por cuanto apenas el 5 por ciento de los pacientes con esta patología trabaja, mientras que en otras naciones aledañas el porcentaje sube al 30 por ciento.

Esta importante diferencia se hace extensiva a otras vertientes de la atención del problema como el escaso desarrollo de unidades de atención temprana de la psicosis y de planes para detectar a los pacientes con perfil alto de riesgo antes de que manifiesten la enfermedad.

En el Sistema Nacional de Salud (SNS) –ha advertido Celso Arango,  jefe de Servicio de Psiquiatría del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid y director científico del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental –Cibersam–, la creación de esa clase de unidades constituye el primer escalón por cumplimentar en España.Se trata de centros de atención integral que no solo disponen de médicos, sino también de un amplio abanico de profesionales de la salud como psicólogos, educadores o trabajadores sociales.

Costes indirectos asociados 

“Las personas con enfermedad mental padecen dificultades para acceder a empleos, y esta falta de productividad laboral también aumenta los costes indirectos relacionados con la enfermedad y se relaciona con falta de autoestima”, ha ratificado Arango. De acuerdo con su discurso, las unidades de atención temprana de la psicosis “deben ser sitios agradables alejados de las unidades tradicionales de Psiquiatría para librar del estigma a los pacientes en un contexto menos medicalizado”. 

En estos dispositivos sociosanitarios –como se hace por ejemplo en Dinamarca con el proyecto OPUS o en Reino Unido con el programa de intervención en psicosis de Oxford Health NHS PT–, se les puede hacer un seguimiento y darles un tratamiento integral, lo cual mejora su pronóstico clínico y funcional, es decir, no solo remiten los síntomas, sino que el paciente dispone de más posibilidades para encontrar un trabajo o llevar una vida más normalizada.