El
Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCaes) del
Ministerio de Sanidad ha publicado recientemente un informe-resumen de 2023 sobre la meningoencefalitis por
virus del Nilo occidental. Durante esta temporada se notificaron
20 casos humanos - 19 de ellos autóctonos y el restante importado -. Del total, ocho de los casos son dan por primera vez en las provincias de
Cáceres, Huelva, Valencia, Barcelona y Toledo. "Estas detecciones en animales y personas en nuevas áreas geográficas indican que probablemente que la extensión geográfica de la circulación del virus sea más amplia que en temporadas previas", concluye el documento.
Estos
19 casos autóctonos fueron notificados entre el 24 de julio y el 23 de octubre de 2024 y están relacionados con la exposición en las comunidades autónomas de Extremadura (14), Andalucía (1), Comunidad Valenciana (1), Castilla-La Mancha (1) y Cataluña (1). Del total mencionado, 13 presentaron clínica neurológica grave y tres de ellos fallecieron. Cinco se detectaron mediante cribados de sangre en donantes con síntomas muy leves o asintomáticos. Adicionalmente, se detectó otro caso de una persona
procedente de Marruecos.
En cuanto a los animales,
se notificaron 38 focos en équidos de múltiples provincias y 19 aves afectadas en otras tanto.
En las temporadas 2021-2022, el número de casos ha sido menor, con seis y cuatro casos humanos autóctonos respectivamente, todos ellos con clínica de meningoencefalitis.
Pero, ¿cuál es el riesgo en conjunto para la nueva temporada, es decir, la de 2024? Si se tiene en cuenta la probabilidad de transmisión y el impacto de la enfermedad, el documento del organismo dirigido por
Fernando Simón lo califica de "moderado" en las zonas donde durante 2023 o en temporadas anteriores se han detectado focos equinos, aves, o mosquitos infectados, así como casos humanos,
En aquellos lugares donde el
virus no se ha detectado, el
riesgo es considerado "menor", "aunque no se descarta la extensión de la circulación del virus a nuevas áreas".
Esta Evaluación rápida de riesgo de la
meningoencefalitis por virus del Nilo occidental en España explica su desarrollo: "Aunque la aparición de casos humanos es esperable en zonas donde la circulación del virus ya es conocida, la aparición de nuevas áreas afectadas, así como la introducción en los
cribados en donantes de sangre, justifican la realización de este resumen de la temporada 2023 y una evaluación del riesgo".
Recomendaciones para el virus del Nilo occidental
Este informe también aprovecha la oportunidad para lanzar una serie de recomendaciones. En primer lugar, señala el desarrollo de los objetivos y actividades del
Plan de Prevención, Vigilancia y Control de las Enfermedades transmitidas por Vectores para asegurar "una acción integral y multisectorial basada en el concepto 'Una sola salud'".
Además, inciden en fomentar el desarrollo de planes autonómicos y la
inclusión del control de los mosquitos dentro de los programas de gestión de plagas de los ayuntamientos. Para los escenarios donde se han detectado animales infectados o se han producido casos concretos, lanzan seis mensajes:
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Reforzar la vigilancia epidemiológica y sistemas de alerta temprana en humanos, asegurando así la "vigilancia activa" de casos de meningoencefalitis linfocitaria en personas que residan en zonas de mayor riesgo.
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Acrecentar las actividades de vigilancia activa y pasiva de este virus en caballos y aves.
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Insistir en la vigilancia entomológica en mosquitos del género Culex en las zonas de riesgo.
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Realizar actividades de control vectorial de forma periódica al principio de cada temporada, actuando sobre los estados larvarios.
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Hacer estudios virológicos para determinar la existencia de cambios en las características de este virus.
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Informar a la población sobre medidas de control vectorial peridoméstico y medidas de protección individual.
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Ante casos humanos confirmados, poner en marcha las medidas preventivas establecidas por el Comité Científico para la Seguridad Transfusional y Organización Nacional de Trasplantes (ONT) "para garantizar la seguridad de la sangre y los componentes sanguíneos y aplicar medidas de seguridad en órganos, células o tejidos".
Este texto también recoge las
medidas de salud pública llevadas a cabo por las
comunidades autónomas más afectadas.
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