Redacción. Las Palmas de Gran Canaria
Miguel Ángel Martínez García.
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La presión positiva continua en la vía aérea (CPAP) sería el tratamiento idóneo para ancianos con apnea del sueño grave, según un estudio publicado en la revista European Respiratory Journal, el primero que aborda este tratamiento en población de la tercera edad.
Miguel Ángel Martínez García, miembro de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) y primer firmante del artículo, explica que las mejoras en los pacientes con el uso de CPAP “se perciben especialmente en los síntomas diurnos y nocturnos, y en la esfera social y emocional”. El 70 por ciento de los pacientes ancianos toleran adecuadamente el tratamiento con CPAP al menos durante una media de 4 horas por noche, el mínimo efectivo.
Hasta este momento, lo estudios se habían enfocado en pacientes de mediana edad. “La edad no debería suponer un impedimento para la prescripción de CPAP en ancianos con apnea del sueño grave”, concluye Martínez, que ha presentado las conclusiones principales del estudio en el marco del 48 Congreso Nacional Separ.
El tratamiento con CPAP en población de edad avanzada mejora los síntomas relacionados con el sueño, como los ronquidos, las crisis asfícticas, las pesadillas, la nicturia y la hipersomnolencia diurna. “La presión positiva en la vía aérea permite sentirse más despierto y con menos sueño durante el día”, regularizando los patrones de descanso y sueño y logrando de este modo “reducir la ansiedad y la depresión, así como mejorar el riesgo cardiovascular”, además del estado anímico de los pacientes.