La
red de centros de salud españoles se mantuvo a grandes rasgos estable durante el año 2023, aunque del
Catálogo de Hospitales que acaba de presentar el Ministerio de Sanidad se pueden extraer nuevas conclusiones. La principal es que, pese a que el saldo de hospitales activos es negativo (hay cinco menos), el
Sistema Nacional de Salud (SNS) incorporó más de medio centenar de
camas gracias al empuje de la inversión púbica. No obstante, se ha reducido ligeramente la oferta del ámbito privado, que en este lapso de tiempo ha ‘perdido’ ocho centros.
Esta reedición del
Catálogo Nacional de Hospitales, con datos actualizados a 31 de diciembre de 2023, cifra en 840 los centros sanitarios activos en España. La mayoría son de
naturaleza privada (410), mientras que 332 están gestionados por las
comunidades autónomas. Otros cuatro están vinculados al
Estado (dos de ellos al Ingesa, el Instituto de Gestión Sanitaria) y el resto a diputaciones (2), municipios (7), el Ministerio de Defensa (2), mutuas colaboradoras con la Seguridad Social (21) y otras entidades y organismos públicos o no gubernamentales (62).
En
comparación al informe de 2022, el Sistema Nacional de Salud cerró un hospital gestionado por las comunidades autónomas y ocho privados. Por el contrario, sumó uno más de
propiedad municipal, otro ligado a mutuas y dos más de otras entidades y organismos públicos o no gubernamentales.
La mayoría de los hospitales son de naturaleza privada (410), mientras que 332 están gestionados por las comunidades autónomas
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En términos absolutos, las comunidades que disponen de un mayor número de centros son
Cataluña (199),
Andalucía (136) y
Madrid (90), lo cual no es de extrañar, dado que estas son las regiones con mayor nivel de población. Eso sí, tanto
Cataluña (-4) como
Madrid (-1), sin embargo, han perdido infraestructuras en el último año. En el otro extremo se encuentran
Cantabria, con siete centros; y
La Rioja, con ocho, además de
Ceuta y Melilla que disponen de un único hospital.
Camas hospitalarias en España
Aunque la estructura hospitalaria de España ha perdido algo de densidad, este hecho no ha supuesto una reducción del
número de camas. Todo lo contrario: estas han aumentado hasta las
159.587, lo que supone un aumento de 539 respecto al anterior ejercicio.
Los datos del Ministerio de Sanidad revelan que este incremento es resultado de un mayor esfuerzo por parte de las administraciones autonómicas, que entre 2022 y 2023
incorporaron 719 camas (hasta las 95.800). No obstante, la sanidad privada dispone de 833 menos (46.691).
No son, en cualquier caso, cifras alarmantes. De hecho, la
gestión indirecta fue la que
evitó el pasado año el déficit de camas hospitalarias, con un refuerzo de la oferta del 1,8 por ciento.
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