Los españoles encuentran más obstáculos para recibir la asistencia médica que necesitan que hace seis meses, según el avance de resultados del
Barómetro sanitario. La encuesta del
Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) revela que hasta el 15,8 por ciento de la muestra, 2,2 puntos más respecto a junio, necesitó pasar por consulta por un
“verdadero problema de salud” y no lo consiguió a tiempo. Esta realidad tiene cabida en un contexto de creciente tensión ente administraciones y profesionales y el consecuente incremento de las listas de espera, aunque según el Barómetro la confianza de la ciudadanía hacia el
sistema público de Salud se ha incrementado respecto a la pasada encuesta: casi siete de cada diez, el 68,6 por ciento, opta por acudir al médico de familia público cuando lo requiere, tasa que cae hasta el 57,3 por ciento cuando lo que se busca es un especialista.
En concreto, la tercera oleada del Barómetro sanitario revela que seis de cada diez pacientes que
necesitaron asistencia por problemas de salud la recibieron a tiempo. No obstante, el 15,8 por ciento
“la necesitó y no pudo consultar”, índice que hace seis meses se situaba en el 13,6 por ciento.
La mayoría de quienes no lograron ser asistidos, el 47,5 por ciento, alega que cuando le dieron cita
“ya no la necesitaban”. Otro 27,3 por ciento indica que no consiguió
“contactar con el centro médico”, mientras que el 7,3 por ciento “pensó que los centros estaban muy saturados y se fue a urgencias directamente”.
Más confianza en la sanidad pública
Lo cierto es que el hecho de que existan más problemas para acceder a la sanidad no ha enterrado la confianza de la ciudadanía hacia el Sistema Nacional de Salud (SNS). Por el contrario, hasta el 68,6 por ciento de los encuestados aseguran que, si necesitan ir al médico de cabecera, lo harían por la
vía pública, una tasa casi idéntica (68,8) a la de junio. Casi tres de cada diez, el 27,7 por ciento, opta por la privada.
En la misma línea, hasta el 75 por ciento de la muestra acude a hospitales públicos cuando
requiere ser ingresado, y el 71,5 por ciento utiliza también los servicios de urgencias de gestión directa.
Los márgenes se estrechan cuando lo que se buscan son
especialistas. El 57,3 por ciento acude al sistema público, mientras que el 38,7 por ciento se decanta por clínicas privadas.
Según los datos del CIS, nueve de cada diez ciudadanos se benefician de los servicios que les ofrece la Seguridad Social, mientras que el 5,1 por ciento recibe atención privada por parte de
Muface, ISFAS o Mugeju.
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