El rey destaca la labor de los sanitarios en hospitales durante 2016

Como cada año, la llegada de la Nochebuena marca el momento elegido por Casa Real para que el Rey lance su mensaje personal a todos los españoles para hacer balance y abordar los retos presentes y futuros de la sociedad. En este caso, Felipe VI ha querido defender un mensaje de cohesión social y de unión como fortaleza a destacar del carácter actual de los españoles. 

Recordando los complicados años de la crisis que el país empieza a dejar atrás, sentado en su despacho habitual del Palacio de la Zarzuela y con las banderas de España y de la Unión Europea presidiendo la estancia, Felipe VI ha mencionado sus viajes por la geografía nacional en los que ha sido "testigo de la labor de tantos servidores públicos que, con una extraordinaria vocación de servicio a la comunidad, garantizan nuestras libertades, atienden nuestros hospitales o educan a nuestros hijos". 

Felipe VI ha reclamado la unión de los españoles para superar las dificultades.

Se refiere a los muchos compatriotas que, dentro y fuera de España, "velan por nuestra seguridad, defienden nuestros valores y contribuyen al avance de la ciencia y al enriquecimiento de la cultura". Para el monarca, todos ellos son la imagen de nuestro país y también hacen posible que el Estado funcione y se pueda "celebrar un día como hoy". 

Esa ha sido la única referencia de Felipe VI al sector sanitario en sus palabras navideñas de más de doce minutos de duración, en las que asegura que esta vocación de servicio es un motivo "para sentirnos auténticamente orgullosos" y "una razón para la esperanza, porque una sociedad que mantenga estas actitudes, estas convicciones y estos valores no puede tenerle miedo al futuro". 

"Estoy seguro de que nuestra memoria colectiva reservará un lugar de honor en la historia para estos tiempos de sacrificio y abnegación; pero también de generosidad y superación", ha declarado el Rey. 

El papel de la educación

Esta referencia sanitaria se ha producido entre una especial mención a la revolución tecnológica que estamos atravesando, y para la que ha recalcado la importancia de la educación para "adaptarnos a esa nueva realidad imparable y desarrollar al máximo nuestras habilidades para actuar con éxito en la ciencia, la economía o la cultura, también en la industria y en la seguridad; pero preservando siempre los valores humanos que nos identifican y nos definen".

Antes de terminar su intervención, Felipe VI ha afirmado creer en una España consciente, solidaria, firme en sus valores, alejada del pesimismo, de la desilusión o el desencanto. Un España, según su opinión, decidida a superar las dificultades que, aunque grandes, son también vencibles. 

Unidos y sin fracturas

En este punto, el monarca ha señalado que no tiene duda que se podrán superar "si entendemos que ya no vivimos tiempos para encerrarnos en nosotros mismos, sino para abrirnos al mundo; si tenemos claro que no lo son tampoco para las fracturas, para divisiones internas, sino para poner el acento en aquello que nos une, construyendo sobre nuestra diversidad; son tiempos para profundizar en una España de brazos abiertos y manos tendidas, donde nadie agite viejos rencores o abra heridas cerradas", ha dicho, en un momento en el que sigue en la palestra la hoja de ruta del independentismo catalán. 

Felipe VI ha cerrado su discurso navideño en las tres lenguas cooficiales del Estado, afirmando antes que son tiempos en los que hay motivos y razones más que poderosas para la unión, "para trabajar todos juntos, desde cualquier lugar de nuestro país, con ilusión, con ideales y con proyectos para la mejor España". 

Vista general del despacho donde el Rey realiza su discurso navideño en el Palacio de la Zarzuela.

Acceda aquí al texto íntegro del discurso del Rey Felipe VI