El Consejo de Ministros ha acordado destinar una partida de
5.511 millones de euros para cubrir los gastos de sanidad en los
Presupuestos Generales del Estado (PGE) del año 2023. Las cuentas del próximo año supondrán un aumento de 77 millones de euros en comparación con el ejercicio anterior, lo que permitirá acometer algunas de las nuevas inversiones previstas en materia de Atención Primaria o de Salud Mental. Es un incremento del
1,4 por ciento.
Las
cuentas presentadas por el Gobierno han colocado así a la política sanitaria como el segundo foco de inversión social que más ha despegado en lo que va de legislatura. La financiación se ha elevado un
145 por ciento en los últimos tres años. Solo el área de
Dependencia ha alcanzado unos mejores resultados con un salto del 151,4 por ciento, que le ha permitido alcanzar los 3.522 millones de euros.
“El gasto en sanidad en esta legislatura se habrá duplicado respecto al último presupuesto del Partido Popular”, ha celebrado la ministra portavoz del Gobierno,
Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. En los cálculos no se ha incluido la inversión en sanidad que corresponde a los
Fondos Europeos activados a raíz de la pandemia de Covid-19.
El incremento presupuestario dedicado al Sistema Nacional de Salud (SNS) permitirá, por ejemplo, mejorar las infraestructuras actuales de la
Atención Primaria y de Salud Mental con una partida concreta de
500 millones de euros. Mientras que también se han destinado otros 50 a facilitar a las universidades que puedan inscribir más alumnos matriculados en Medicina con el objetivo de paliar la falta de facultativos. El objetivo es que en el próximo curso ingresen
1.000 estudiantes más en primero.
El Ministerio de Sanidad se hace con 3.000 millones
El desglose de las cuentas públicas ha revelado que un total de
3.010 millones se canalizarán directamente a través del propio Ministerio de Sanidad. El equipo de Carolina Darias contará de esta manera con un
6,4 por ciento más de financiación para las políticas de salud que en el 2022 cuando la partida fue de 2.828 millones de euros.
Los Presupuestos cuentan con una inversión total en gasto social de
266.719 millones de euros. Lo que supone que 6 de cada 10 euros se ha invertido en esta estrategia. Este monto ha sido posible gracias a unos ingresos previstos de 307.445 millones de euros entre los ingresos por
impuestos y los no tributarios. Los números se han planteado en un contexto de recuperación económica en el que el Gobierno confía en que la economía se dispare un
4,4 por ciento este ejercicio.
Aunque la sanidad es una de las principales beneficiadas en los PGE del próximo año, el sector sigue por detrás en otras fórmulas de financiación como la relativa a los
Fondos Europeos de la Unión Europea. Hasta el momento ha canalizado un
5,1 por ciento del dinero que ha activado Bruselas para levantar de la crisis económica del Covid-19, lo que la sitúa como la sexta cartera en la lista por detrás de I+D+i, Industria y Energía, Infraestructura y Ecosistemas, Vivienda o Comercio y Turismo.
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