La preocupación por la situación actual de la sanidad es un fenómeno oscilante que varía en función de la ideología. El barómetro del mes de octubre del
Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha revelado que un
1,4 por ciento de los ciudadanos considera que la asistencia en el Sistema Nacional de Salud (SNS) es el principal problema al que se enfrenta España. Aunque el indicador ha retrocedido 7 décimas, el comportamiento ha sido bien distinto en función de la
orientación política de los participantes. El análisis de los datos revela una brecha entre las posiciones de la izquierda y de la derecha, así como un cierto
descontento entre los simpatizantes de las formaciones que habitualmente sostienen al Gobierno.
En el seno de la coalición la preocupación ha disminuido notablemente, aunque los dos partidos se ubican por encima de la media general. Un
2,2 por ciento de los votantes habituales del
PSOE considera que la sanidad es el mayor problema a tener en cuenta, lo que representa 1,1 puntos por debajo de la encuesta de septiembre. Es el quinto grupo que más incidencia ha hecho sobre este sector, a pesar de que el
Ministerio de Sanidad se encuentra en manos de la bancada socialista.
También ha experimentado un recorte en las preocupaciones para los ciudadanos que votaron por
Unidas Podemos en las pasadas elecciones generales. Un
1,9 por ciento de los simpatizantes morados ha colocado en cabeza de la tabla de problemas a la sanidad, frente al 2,8 por ciento que lo hacía el mes anterior. Mientras que el malestar ha quedado prácticamente a cero entre los sectores de las confluencias territoriales que también integran el grupo político.
Este cambio de paradigma se produce en un momento en el que los votantes de ambas formaciones se han volcado con otros aspectos que consideran prioritarios como la
crisis económica, el paro, la desigualdad o la pobreza que han copado las primeras posiciones. Mientras que la gestión sanitaria o el peligro por la pandemia de Covid-19 encadenan varios meses a la baja.
La preocupación por la sanidad en la oposición
El barómetro del CIS ha sacado a la luz una notable diferencia entre las posiciones del ala de la izquierda y de la derecha de la sociedad española. Los votantes de
Partido Popular, Ciudadanos y Vox dan cada vez una menor importancia a los problemas sanitarios, lo que los ha dejado relegados en la lista de preocupaciones de la ciudadanía. Los tres partidos de la oposición se ubican muy por detrás del Gobierno y por debajo de la media general de España.
Las filas de simpatizantes de la formación que preside
Alberto Núñez Feijóo han demostrado un cambio generalizado en su postura. Si hace un mes, era la mayor preocupación para el 1,1 por ciento, ahora apenas lo representa para el
0,3 por ciento. En el caso del partido de
Inés Arrimadas, la situación se ha mantenido estable en un
0,4 por ciento. Mientras que para los seguidores de
Santiago Abascal directamente ha desaparecido de los tres principales problemas del país, a pesar de que llegaba a marcar un 1,5 por ciento en la última encuesta.
La crítica sanitaria irrumpe entre los apoyos del Gobierno
La situación actual de la sanidad española sí que se ha colocado como una de las grandes preocupaciones entre los votantes de los partidos que habitualmente prestan su apoyo parlamentario al Gobierno de la coalición. El barómetro del CIS ha demostrado un aumento de esta tendencia en las filas de
Más País, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) o Compromís, que urgen a resolver los problemas del sector cuando resta apenas un año de legislatura.
El sondeo ha situado de nuevo a los simpatizantes de
la formación que lidera Íñigo Errejón como los más volcados con la realidad sanitaria. Hasta un
10,2% de las personas que votaron por la formación en las últimas elecciones considera que la sanidad es
el principal problema que enfrenta el país, lo que representa 2,1 puntos por encima de la anterior encuesta. Para sus votantes, solo la crisis económica y la actuación política resultan más flagrantes.
También se ha observado esta tendencia entre los simpatizantes de
ERC que hasta octubre no habían colocado a la sanidad como una de las tres principales causas de preocupación. Sin embargo, ahora ha irrumpido con fuerza. Un
2,4 por ciento de su electorado ha situado el funcionamiento del Sistema Nacional de Salud (SNS) en la primera posición de problemas que debe resolver la clase política. Una tendencia muy parecida a la de
Compromís que ha pasado de 0 a
5 por ciento en apenas un mes.
Para comprender esta realidad, hay que tener en cuenta que las encuestas telefónicas se llevaron a cabo entre el 1 y el 10 de octubre. Se trata de una semana clave marcada por la presentación de la
partida sanitaria de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), el acuerdo para mejorar el sueldo de los funcionarios o la celebración del
Día Mundial de la Salud Mental, que puso el foco en las necesidades de seguir avanzando en estas patologías y que abanderan buena parte de los grupos más preocupados.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.