El Gobierno central, a través del Ministerio de Trabajo, asume la
‘penosidad’ laboral en la que se encuentran las plantillas sanitarias, colectivo al que encasillan entre los más vulnerables por las condiciones de jornada y los riesgos que conllevan ciertas actuaciones para la salud de los trabajadores. Pero las impresiones que se desprenden del seno del Ejecutivo no han tenido un verdadero impacto a la hora de aligerar el proceso de rebaja de los coeficientes reductores en la pensión para permitir la
jubilación anticipada en el Sistema Nacional de Salud (SNS) sin merma económica. Por el contrario, el Ministerio de Seguridad Social mantiene en el aire esta posibilidad, que supedita a una negociación sindical pese a que otros sectores ya disfrutan de ella.
En un reciente
informe sobre la Seguridad y Salud en el Trabajo, el Ministerio de
Yolanda Díaz asume esa necesidad de “seguir profundizando en el análisis de los riesgos y en la adopción de medidas” que mejoran las condiciones de seguridad en el sector sanitario, y llama a analizar los factores que les hagan vulnerables “para incorporar la
prevención de riesgos laborales de manera transversal en otras políticas públicas”.
Hace años que los representantes de los médicos españoles piden avanzar por esta vía. Desde el
Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (Cgcom) apelan a la penosidad propia de estos profesionales, sobre todo en las especialidades con mayor presión asistencial, que no solo deben hacer frente a una “alta intensidad horaria” con
guardias y trabajo nocturno sino que están expuestos a agentes peligrosos como el Covid-19. A ello se suma el creciente número de
agresiones, así como el aumento de
secuelas físicas y psicológicas por el llamado ‘síndrome burnout’.
Son las mismas demandas que los agentes sociales han trasladado al Gobierno en el marco de la negociación del
nuevo Estatuto Marco del personal sanitario. El pasado verano, sindicatos y Ministerio de Seguridad Social
aprobaron una primera reforma básica de la normativa, pero la parte referente a la jubilación anticipada quedó apeada del texto. Este apartado se volverá a tantear en próximas reuniones, aunque no hay previsión de cuál será el alcance del acuerdo.
"Años de anticipación" para la jubilación anticipada en el SNS
Lo cierto es que en el departamento de José Luis Escrivá andan con pies de plomo, pues reconocen que la inclusión de médicos, enfermeros y el resto del personal sanitario en el modelo de jubilación anticipada (en el que se encuentran, entre otros policías y bomberos) puede ocasionar problemas de vacantes en el SNS.
“Hacen falta años de anticipación”, sostienen en el Ministerio.
En cualquier caso, Seguridad Social insiste en que se abordará
“a la mayor brevedad posible” el marco regulador de los procedimientos para establecer coeficientes reductores por penosidad “y anticipar la edad de jubilación en el SNS”. Añade al respecto que esta adaptación normativa “incidirá en la tramitación de las peticiones de las profesionales sanitarias actualmente en curso” de acuerdo con las disposiciones de transitoriedad que se establezcan “y en todo caso sin merma alguna de los derechos que les amparan en relación con dicho procedimiento”.
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