Redacción / Imagen: Miguel Fernández de Vega y Joana Huertas. Madrid
Salarios, gestión, Primaria y Hospitalaria, prescripción enfermera… Son algunas de las cuestiones de rabiosa actualidad que los representantes sanitarios de las formaciones más importantes que concurren el 20-D pondrán sobre la mesa en la próxima legislatura. Antes, PP, PSOE, Ciudadanos, Unidad Popular y Podemos las explican en el debate de Sanitaria 2000.
De izquierda a derecha: Ricardo López, director general de Sanitaria 2000; Daniel Álvarez Cabo, portavoz de Ciudadanos en la Comisión de Sanidad de la Asamblea de Madrid; José Ignacio Echániz, secretario nacional de Sanidad y Servicios Sociales del Partido Popular; Rafael Bengoa, responsable de Sanidad del grupo de expertos del PSOE; Javier Padilla, miembro del área estatal de Sanidad de Podemos; y Rosa Magallón, candidata de Izquierda Unida-Unidad Popular al Congreso de los Diputados.
|
Ricardo López, director general de Sanitaria 2000: Este debate está enfocado en las propuestas que los partidos harán en sanidad tras las elecciones generales. En el primer bloque abordaremos el ámbito laboral. Pasada la crisis, ¿es el momento de plantearse un cambio?
José Ignacio Echániz, secretario nacional de Sanidad y Servicios Sociales del Partido Popular: Hace cuatro años, España estaba en una situación muy delicada. Por ello, de cara al futuro, es necesario un Plan Estratégico de Recursos Humanos para profesionales sanitarios que permita abordar sus necesidades desde las facultades, la retribución, la carrera profesional hasta la gestión clínica.
Daniel Álvarez Cabo, portavoz de Ciudadanos en la Comisión de Sanidad de la Asamblea de Madrid: Es necesario incrementar el presupuesto destinado a sanidad, aumentar las plantillas e incorporar determinadas profesiones que no se integran en el Sistema Nacional de Salud (SNS). Respecto a los salarios, deben aplicarse de incentivos asociados a resultados en salud y pactado con los trabajadores. Asimismo, recuperaremos la carrera profesional, la extenderemos a todos los sanitarios y la retribuiremos en función del presupuesto.
Rafael Bengoa, responsable de Sanidad del grupo de expertos del PSOE: Desde el partido, apostamos por aumentar las partidas presupuestarias para integrar los modelos sociales y sanitarios e incentivar a los profesionales que trabajen en este nuevo sistema. No es poner más dinero para hacer lo mismo, sino para transformar la sanidad en un futuro.
Rosa Magallón, candidata de Izquierda Unida-Unidad Popular al Congreso de los Diputados: Nosotros proponemos recuperar el poder adquisitivo y equipararlo al IPC de todos los trabajadores, así como ligarlo en un sistema de productividad variable con objetivos de la calidad. Apostamos también por volver a las 35 horas semanales en sanidad y sobre carrera profesional, abogamos por organizar el sistema y ligarlo a tareas asistenciales, docentes, de gestión y de investigación.
Javier Padilla, miembro del área estatal de Sanidad de Podemos: Esta formación no va a fomentar una política laboral para los profesionales a espaldas de los profesionales. A nivel salarial, hay que recuperar los sueldos de los funcionarios y, dentro del sector sanitario, abordaremos la brecha que hay entre comunidades.
“Si se deroga el decreto 16/2012, se perderá la universalización”.
|
Ricardo López: Pasamos al segundo bloque de organización, donde podemos hablar de niveles asistenciales, la relación entre Primaria y Hospitalaria, listas de espera, gestión clínica…
Daniel Álvarez Cabo (C’s): Respecto a las unidades de gestión clínica (UGC), hay que decir que si no hay un presupuesto, este modelo carece de sentido. Para ello, defendemos una descentralización de la gestión a nivel de los centros sanitarios, aumentando la capacidad de los gerentes pero sometida a la transparencia.
Rafael Bengoa (PSOE): Es importante transformar el sistema actual. Y ello se hace con el arsenal de gestión sanitario ya existente, como historia clínica digital, las farmacias comunitarias, la autoformación de los pacientes… Sobre la integración entre AP y hospitalaria, considero que nos hemos focalizado más en la integración estructural de la gestión que en la integración clínica.
Rosa Magallón (IU-UP): Es necesario proporcionar el gasto entre Primaria-Especializada, el verdadero eje del SNS, a través de una microgestión y con la participación de los profesionales sanitarios. Es decir, una coordinación sin paternalismos.
Javier Padilla (Podemos): Sobre gestión clínica, es necesario sacar a relucir el borrador del Real Decreto que ha hecho el Gobierno y el cual no deje contento a los profesionales sanitarios, porque ha descafeinado este asunto totalmente. Dentro de nuestra visión, proponemos una gestión por competencias y no por categorías profesionales.
José Ignacio Echániz (PP): La gestión es un instrumento muy importante para conseguir calidad en el SNS. Abogamos por la profesionalización, a través de una acreditación parecida al MIR para los gestores sanitarios.
Ricardo López: Pasamos a un breve bloque de debate sobre sus medidas en organización y gestión sanitaria.
“La enfermería se ha focalizado mucho en prescripción”.
|
Daniel Álvarez Cabo (C’s): Estamos plenamente de acuerdo con la profesionalización de la gestión, que debe aplicar autonomía y responsabilidad. Asimismo, se debe contar con los trabajadores para gestionar las listas de espera para ajustar la demanda a las necesidades de los pacientes.
Rosa Magallón (IU-UP): También creemos que es clave la profesionalización de la gestión, porque actualmente está basada en un ideario político y no en obtener unos resultados en salud. Por otro lado, nos preocupa la fragmentación que pueden suponer las UGC, ya que pueden estar más basadas en los compromisos empresariales que en los objetivos sanitarios
Javier Padilla (Podemos): Los cargos de la gestión deben dejar de ser una elección política. Hay que tener cuidado con la entrada del ‘gerencialismo’ basado en la competitividad pero creemos que las UGC pueden crear oportunidades en la autogestión entre los profesionales y el establecimiento de objetivos que nazcan de la cooperación.
Rafael Bengoa (PSOE): No hace falta elaborar un decreto sobre la profesionalización de la gestión, sino que simplemente es un comportamiento que hay que exigir a los políticos. En algunas comunidades se ha seguido una idea diferente, lo que ha permitido mantener a todos los directivos y las políticas que se apliquen, independientemente de quién gobierne.
Ricardo López: Para cerrar este bloque me gustaría que se definieran y qué posición tienen sobre la prescripción enfermera.
Daniel Álvarez Cabo (C’s): Estamos en contra de la redacción final del decreto porque creemos que una norma que había sido consensuada con todas las profesiones sanitarias implicadas y con las fuerzas políticas y con informes favorables del Consejo de Estado, no tiene ningún sentido modificarlas al final. Nuestro planteamiento si tenemos responsabilidades de gobierno es volver a la redacción inicial reforzando el rol de la enfermera porque además lo regulaba muy bien.
Rafael Bengoa (PSOE): El PSOE lo específica en su programa: Prescripción enfermería, sí. También iría un poco más lejos porque creo que la enfermería se ha focalizado mucho en la prescripción cuando los nuevos modelos asistenciales que vienen se centran más en casa, más en la comunidad, más en la prevención, más en la calidad y más en primaria y menos en los hospitales y abren un abanico genial para las nuevas funciones de enfermería como son enfermería del caso y enfermería que ayuda a la autogestión de los pacientes.
Rosa Magallón (IU-UP): Prescripción enfermera sí y empoderamiento de la enfermera, como comenta Rafa, también.
José Ignacio Echániz (PP): Las sociedades modernas tienen perfectamente definido desde el punto de visto de la garantía quién tiene que hacer el diagnóstico y el tratamiento de las enfermedades. En este país desarrollamos una legislación que permitía avances importantes en la prescripción de algunos fármacos en la enfermería. Lo que es indispensable en este momento y no existe es un consenso profesional.
A veces se pide a las administraciones públicas y a los políticos que se adopten medidas cuando no existe un consenso profesional y es evidente que no existe en este momento entre las distintas profesiones colegiadas. No se trata en este momento de tomar decisiones salomónicas como sí de promover de un acuerdo responsable, tranquilo, sosegado y que sea bueno para el paciente. Intentar que sean los buenos profesionales los que encuentren los protocolos, las vías y las fórmulas para que salga ganando el paciente.
Ricardo López:
¿Qué opinan sobre si Primaria y hospitales deben estar unidas en un área o deben funcionar de manera separada?
Rafael Bengoa (PSOE): Toda la evidencia científica en España y fuera indica que es mejor estar en una administración y en un área uniendo y creando condiciones para que los clínicos hablen entre sí y después hacer una integración estructural y no al revés.
Javier Padilla (Podemos): Si vamos a hablar de integrar vamos a tener que hablar de financiar y según cómo se financie el resultado probablemente cambie.
Rosa Magallón (IU-UP): No creo que sea un problema de integración de profesionales sino que es un problema cultural. Hay que dar a entender a la gestión cuál es el papel de cada nivel y cuál es la integración. Hay que hacer una estrategia de crónicos al servicio de los pacientes y no al servicio de los servicios.
Álvarez Cabo explica el modelo de C’s de gestión clínica.
|
Daniel Álvarez Cabo (C’s): Defendemos una integración funcional más allá de una integración estructural. Lo importante no es de qué gerente se depende sino de que haya comunicación entre los profesionales y una historia clínica compartida, lo que es clave para que haya continuidad asistencial.
José Ignacio Echániz (PP): Hablar desde el desconocimiento es muy sencillo y también piden más recursos que es lo quiere todo el mundo. El problema es cómo se va a hacer. Nosotros pusimos las áreas integradas, lo que no significa que el gerente del hospital gobierne atención primaria, sino que hay un único equipo de atención primaria y especializada trabajando de forma conjunta para resolver los problemas de los ciudadanos.
Ricardo López:
Abrimos un nuevo bloque de innovación. En el fomento de la investigación en esta legislatura ha habido noticias regulares en este tema con la marcha de investigadores a otros países.
Rafael Bengoa (PSOE): Lo que puede estar faltando en el modelo de innovación es la innovación en el liderazgo. Tenemos profesionales de 1ª categoría, arsenal de gestión, nuevos modelos, nuevas tecnologías y medicamentos. Creo que lo que necesitamos es innovar en el modelo de liderazgo. Propondría dejar de hacer tanto de arriba a abajo y que el centro de la organización empiece a verse a sí misma con un liderazgo que genera condiciones de innovación.
Rosa Magallón (IU-UP): Entendemos que la innovación tiene que ser de abajo a arriba y también en la gestión tiene que mostrar sus evidencias científicas. Hay modelos como el modelo Alzira que se implantaron sin evaluar y que siguen sin evaluar. Innovación sí, pero con evidencia científica demostrada porque si no estamos jugando a la gestión.
José Ignacio Echániz (PP): Tenemos que mejorar nuestra capacidad de I+D+i. Para eso el Consejo de Ministros aprobó el viernes pasado la Agencia Estatal de organización de toda la investigación. Tenemos que crear un clima y un entorno favorable desde el punto de vista empresarial. Me preocupan desarrollos como el de Andalucía de la subasta. La subasta puede ser muy buena para vender un cuadro o un jarrón chino, pero no para un producto innovador como es una molécula farmacéutica o para algo que tiene que ver con la salud de los ciudadanos. La subasta lo único que hace es conseguir el mejor precio posible, pero en sanidad el mejor precio posible no es la mejor atención posible.
Daniel Álvarez Cabo (C’s): Las innovaciones que se introduzcan en el conjunto del sistema deben ser equitativas en todas las CCAA. Las decisiones que propongan deben adquirir un carácter vinculante en el seno del Consejo Interterritorial para que se traduzcan en prácticas clínicas o en decisiones por parte de diferentes gobiernos regionales.
Padilla defiende el modelo de Sanidad Pública de Podemos.
|
Javier Padilla (Podemos): Tenemos que tener en cuenta el concepto de equidad. Solemos quedarnos en la ley de cuidados inversos que dice que generalmente los colectivos que menos necesidades tienen son los que más acceden a los servicios y viceversa. En el ámbito de la innovación es algo muy presente: las innovaciones suele acceder la gente más integrada dentro del sistema y la gente que se queda en los márgenes es la que no accede. Dotar a la innovación de una visión social y de una visión de desigualdades sociales en salud es imprescindible para que nadie se nos quede atrás.
Ricardo López: Prescripción por unidosis es una de las propuestas de podemos. ¿Es incompatible la prescripción por unidosis con la innovación?
José Ignacio Echániz (PP): Tenemos una enorme oportunidad en los próximos meses porque tenemos la posibilidad de transponer la disposición europea de contratación. Tenemos la oportunidad dentro de ese capítulo de reforma de leyes de contratación disponer un ámbito sanitario en el que podamos trasladar estas cuestiones que hemos puesto encima de la mesa: que los medicamentos y productos sanitarios no se pueden comprar de la misma manera, que hay que avanzar en las fórmulas de compra innovadora que permitan medir resultados y compararlos y para eso necesitamos datos. En el ámbito de la unidosis quiero resaltar que el Ministerio de Sanidad ha desarrollado nuevas fórmulas que permiten que cerca de 1.000 medicamentos tengan listados adecuados a la indicación y a la prestación farmacéutica.
Rosa Magallón (IU-UP): Estamos a favor de la unidosis, también por la indicación de los paquetes de los genéricos y que la administración financie los medicamentos realmente esenciales y que han aportado evidencias.
Daniel Álvarez Cabo (C’s): De acuerdo con la unidosis y nos parece clave implicar a las farmacias con un nuevo modelo de farmacia comunitaria para que se favorezca la adherencia terapéutica que va a ser otro elemento de calidad y eficiencia.
Javier Padilla (Podemos): Es fundamental la isoapariencia y el que los genéricos tengan el mismo compuesto pero diferente forma genera efectos en la salud por su atractivo aunque estén demostrados y tengan evidencia científica.
Ricardo López: Vamos con el cuarto bloque, dedicado a la Política en general, con letra mayúscula: competencias en materia sanitaria, validez del Consejo Interterritorial…
Rosa Magallón (IU-UP): Sobre fronteras y competencias autonómicas, nosotros creemos que un asunto fundamental reside en la unificación de la historia clínica; nos parece esencial crear un modelo único electrónico tanto en Primaria como en Especializada. No puede ser que las diecisiete comunidades autónomas tengan su modelo con su propio sistema de soporte y su pago: es un auténtico drama.
“Siempre se recorta más en la Atención Primaria”.
|
Por otro lado, estamos a favor de la universalización y de derogar el Real Decreto 16/2012. Y, con respecto al Consejo Interterritorial, nos parece necesario para el control y ajuste de las desigualdades sociales y para cohesionar asuntos de salud pública de ámbito suprarregional como, por ejemplo, las vacunaciones, por cierto dotadas de un calendario basado en evidencias y no en presiones en la industria.
Javier Padilla (Podemos): Nuestro objetivo es lograr la mayor calidad técnica de la sanidad con la mayor participación posible de los profesionales. Y ello a partir de un aumento de la financiación entendida más como el gasto sanitario en euros per cápita en lugar de porcentajes en función del producto interior bruto, ya que, si no lo hacemos así, nos abocamos al déficit financiero en momentos de contracción del sistema, y a la sobrefinanciación cuando hay bonanza económica.
Creemos en la universalidad del sistema sanitario. La evidencia científica apunta a que dejar fuera a la población inmigrante indocumentada no solo no reduce los costes, sino que puede suponer riesgos para la salud individual y pública. Y apostamos más por la interoperabilidad de la historia clínica electrónica que por su unificación.
José Ignacio Echániz (PP): Si se deroga el actual decreto 16/2012, se pierde la universalización de la sanidad, precisamente, las 700.000 nuevas tarjetas sanitarias que, en este momento, existen y no había antes, así como la capacidad de los parados de larga duración de estar exentos de pagar el 40 por ciento de los medicamentos en el momento de perder el empleo. Así que cuidado con derogar aspectos tan favorables para los ciudadanos.
Daniel Álvarez Cabo (C’s): Nosotros vamos a hacer una reforma del modelo de financiación autonómica que sirva para dotar de más recursos, en los servicios públicos esenciales, a todos los gobiernos regionales, y que mitigue las diferencias existentes entre los presupuestos, medidos en términos de euros per cápita, entre unas y otras (me refiero al rango de 500 euros entre la más financiada ahora mismo, País Vasco, y la que menos, Andalucía).
Los candidatos participantes en el debate con su moderador, Ricardo López (en el centro).
|
También reformaremos el Consejo Interterritorial, para que sea un lugar donde se tomen decisiones vinculantes. Por su parte, el ministerio debe tener un papel de liderazgo, dentro del Estado autonómico, en materia de inspección y de salud pública.
Rafael Bengoa (PSOE): Por nuestra parte, tendremos especial cuidado en uniformar el modelo organizativo y de gestión en cada comunidad autónoma, pues lo vinculamos a la innovación local y a la descentralización. ¿Dónde ha surgido la innovación?: en aquellos clínicos con ideas a nivel local. Así que uniformaremos aspectos como la financiación pero no otros como el mencionado.
Ricardo López: Pasamos a los últimos minutos de debate. Sector público versus privado, motivo de confrontación permanente…
Javier Padilla (Podemos): Podemos plantea una gestión pública directa. Creemos en un sistema sanitario público a nivel de control, provisión y gestión de los recursos. Pensamos que la ley 15/1997 –aprobada por todos los partidos en la cámara salvo dos: IU y BNG– debe ser derogada a salvaguarda de aquellas entidades de tipo cooperativo que trabajen por el común, como las mujeres que prestan asistencia a las maltratadas, por ejemplo.
José Ignacio Echániz (PP): No siempre se ponen las cartas boca arriba en este discurso. En Andalucía, el Partido Socialista hace uno muy beligerante, y, sin embargo, 25 de sus 46 hospitales no los gestiona el SAS de forma directa.
La colaboración público-privada es sana y existe en todos los países de la Unión Europea e incluso los países nórdicos con gobiernos laboristas hacen un uso intensivo de ella. Así que funciona bien, con pequeñas y medianas empresas que pagan sus impuestos y que liberan al sistema sanitario de hacer cosas para centrarse en el paciente y proveerle una excelente atención mientras servicios como la cafetería, los ascensores, los jardines, etc., se pueden encargar perfectamente a un tejido empresarial que lo hace muy bien.
Daniel Álvarez Cabo (Ciudadanos): Nuestra apuesta fundamental es por la gestión pública directa, pero nuestra posición es cauta y respeta las experiencias concertadas de los recursos que ha habido; queremos evaluar los resultados y ver hasta qué punto conviene extender unos modelos u otros.
En lo que atañe a listas de espera, pensamos que hay que llevar a los hospitales públicos al máximo de su capacidad de modo que la concertación sea algo residual.
Rafael Bengoa (PSOE): En los últimos 35 años, la gestión pública del sistema sanitario ha sido muy eficiente. Otra cosa es que el modelo de administración pública esté caduco y adolezca de incentivos y flexibilidad. Pero la contraposición entre lo público y lo privado ha centrado la atención al tiempo que se retiraban 10.000 millones al sector, que suponen el auténtico debate.
Los informes técnicos, más allá de las ideologías, apuntan a la necesidad de evaluación. Mientras carezcamos de esos datos no lo sabremos.
Daniel Álvarez Cabo (C's); José Igancio Echániz (PP); Rafael Bengoa (PSOE); Rosa Magallón (IU-UP); y Javier Padilla (Podemos).
|
Rosa Magallón (IU-UP): La gestión privada no ha demostrado ser más eficiente que la pública, por lo que la concertada tampoco nos convence; es verdad que los gobiernos regionales conciertan prestaciones que normalmente son incompletas, y eso llama a engaño y se usa como una privatización coactiva al tener que esperar menos en la realización de pruebas en la privada, por ejemplo.
Ricardo López: Por último, una pregunta con una solo posible respuesta. Podemos lleva en su programa el fin de Muface. El resto, ¿terminará con la mutualidad de los funcionarios?
Daniel Álvarez Cabo (C’s): Se estudiará.
José Ignacio Echániz (PP): En absoluto. Se trata de un magnífico sistema que, ante todo, genera una alta satisfacción en sus usuarios.
Rafael Bengoa (PSOE): Evaluarlo y estudiarlo para ver si es necesario o no hacer público lo que ahora está en manos privadas. Nuestra obsesión es transformar el modelo y, si para ello hay que tocar Muface, se hará.
Rosa Magallón (IU-UP): Unidad Popular es favorable a eliminar Muface, Mugeju e Isfas.
Ricardo López: ¿Desgravación fiscal del seguro privado?
Javier Padilla (Podemos): No. Es una política regresiva basada en un fundamento no probado: que el apuntado a un seguro privado, gasta menos en la pública.
José Ignacio Echániz (PP): Sí, en los términos que siempre ha existido en España y que ha permitido descongestionar la sanidad pública.
Rafael Bengoa (PSOE): No. Es regresiva y, ahora mismo, el sector privado ya tiene unas buenas condiciones comparativas como para complementar el sistema público.
Daniel Álvarez Cabo (C’s): Al país le interesa que los colectivos con más nivel de renta también tengan una asistencia pública, porque ello cohesiona el sistema.
Rosa Magallón (IU-UP): No. La línea de recortes hace aumentar el seguro privado.
Cada representante político sintetiza la posición de su partido frente al 20-D.
|
Conclusiones:
Javier Padilla (Podemos): Los próximos cuatros años deben dedicarse a reformar el sistema sanitario a partir de tres principios: presencia de la salud en todas las políticas, no solo en las sanitarias; hincapié en reducir las desigualdades sociales y papel fundamental en la gobernanza transparente.
Rosa Magallón (IU-UP): Salario digno y calendario laboral de 35 horas semanales; homogeneizar la carrea profesional; evaluar las intervenciones por medio de una investigación independiente; estrategia nacional de crónicos al servicio de los pacientes; interdisciplinariedad de la atención, enfoque de la salud en todas las políticas, gestión pública y derogación de la modificación del artículo 135, que promueve el pago a los bancos, algo que permitirá reintroducir la financiación que merece el sistema sanitario.
Rafael Bengoa (PSOE): Si hubieran estado con nosotros pacientes, habrían observado uniformidad en muchas de las cosas que se presentan, y hubieran ahondado en que es probable que los partidos se pongan de acuerdo en un pacto alrededor de las grandes metas de los próximos diez años, no solo cuatro.
Procuraremos uniformar el modelo organizativo y de gestión en cada autonomía, pues lo consideramos unido a la innovación local y a la descentralización. Así que uniformaremos, en todo caso, otros aspectos como la financiación.
Es importante transformar el sistema actual a partir de los modelos de gestión sanitario ya existentes, como la historia clínica digital, las farmacias comunitarias, la autoformación de los pacientes…Por otra parte, compartimos más cosas de las que creemos con los demás partidos y podemos pensar, para 2016, en un pacto político por la sanidad y alcanzar esas metas.
Daniel Álvarez Cabo (C’s): Se plantea un escenario en el que habrá que incrementar recursos mediante la mejora de las condiciones laborales de los profesionales, la gestión que dé participación a los pacientes y evaluaciones equitativas que requieren de pactos entre todas las fuerzas políticas.
José Ignacio Echániz (PP): En los últimos cuatro años hemos salvado al sistema sanitario de la tormenta más importante vivida en los últimos 35. Y lo ha hecho la sociedad en su conjunto con un gobierno a la cabeza. Tenemos unos magníficos indicadores sanitarios, resolvemos bien los problemas de salud como muestran los barómetros de satisfacción y España es el país de la Unión Europea donde más años se vive, y, además, uno de los más elegidos para vivir.
Es importante recalcar que, si se deroga el actual decreto 16/2012, se pierde la universalización de la sanidad. Y en asuntos como la colaboración público-privada, las pequeñas y medianas empresas pagan sus impuestos y liberan al sistema sanitario de hacer cosas para centrarse en el paciente y proveerle una excelente atención mientras servicios como la cafetería, los ascensores, los jardines, etc., se pueden encargar perfectamente a un tejido empresarial que lo hace muy bien.
En general se han producido cambios y reformas que han permitido una estabilidad política que es la causa esencial de la recuperación económica. Existen nuevos retos y seremos capaces de alcanzarlos juntos.
Acceda al debate de Sanitaria 2000 íntegro. Parte I.
|
Acceda al debate de Sanitaria 2000 íntegro. Parte II.
|
|