En Oaxaca (México) se han dado cuatro posibles casos de rabia humana. Tres de ellos en menores y un cuarto en una mujer adulta. Los niños fueron mordidos por un murciélago mientras que la mujer pudo contagiarse por un gato semidoméstico, que falleció unos días después con síntomas compatibles con esta enfermedad.
Como zoonosis, la rabia puede transmitirse entre animales y humanos a partir del mordeduras, arañazos o el "
contacto directo con las mucosas de los ojos, nariz, boca", explica Maria del Mar Tomás, microbióloga del Hospital Universitario de A Coruña y portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC).
Los animales, sean domésticos o salvajes,
pueden contagiar a las personas. Sin embargo, siguiendo una serie de medidas se puede
evitar el contagio: "Vacunar a los animales domésticos, perros y gatos sobre todo", señala Tomás. También aconseja "no tener contacto directo" con animales salvajes como "murciélagos, mapaches, perros o zorros".
Una manera de prevenir esta enfermedad, según explica la microbióloga, es "tener los animales domésticos
vacunados y controlados; además de llevar mucho cuidado con los animales silvestres".
Síntomas de la rabia humana
"Es una
enfermedad muy grave, ya que llega rápidamente al sistema central nervioso", explica Tomás a
Redacción Médica. "Es una
inflamación del cerebro y la médula espinal que puede resultar mortal", añade. Los síntomas que suele tener la rabia en humanos son:
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Fiebre
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Dolor
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Hormigueo
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Picores
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Deshidratación general
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Miedo al agua
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Miedo a las corrientes de aire
Prevenir y tratar la rabia en humanos
La rabia en humanos es una enfermedad muy rara en España, ya que los animales que suelen contagiar a los humanos son, sobre todo, los domésticos y
"hay mucho control", ya que deben tener las vacunas al día. Por otra parte, "no permitir que los animales de compañía salgan sin un cuidador de casa (para evitar el contacto de estos con animales silvestres), esterilizar todo el material de los animales domésticos que usan en casa...", todo esto ayudaría a
evitar el contagio entre los animales y las personas.
No obstante, como es el caso de los niños de Oaxaca mordidos por un murciélago,
el mayor riesgo son los animales salvajes, como reconoce Tomás. Por eso, lo más importante es que ante la mordedura u arañazo de uno de ellos se acuda al hospital y
"vacunar cuanto antes", ya que contamos con la antirrábica y eso ayudará a que no se desarrolle la enfermedad.
De hecho,"la profilaxis postexposición contra la rabia se administra ampliamente y
es muy eficaz", por lo que se dan muy pocos casos de infección tras la vacunación, según una
reciente revisión publicada en 'The Lancet'. No obstante, cuando un paciente, a pesar de ser vacunado, desarrolla esta enfermedad puede deberse a "retrasos en la búsqueda de atención sanitaria". Pero no es el único motivo, otras causas son los errores al administrar la inmunoglobulina antirrábica, que los pacientes tienen otras enfermedades o son inmunodeprimidos. Aún así, es "extremadamente raro" que ocurra, según el estudio.
Sobre la posibilidad de que se pueda extender la infección más allá de las personas mordidas, Tomás señala que "es muy difícil", sobre todo teniendo en cuenta que contamos con la vacuna: "Se les ha vacunado a ellos y a sus familiares, por lo que sería muy raro". "Esto son
casos esporádicos que, además, se han dado por desgracia en zonas marginales y por la mordedura de un animal salvaje", concluye la portavoz de SEIMC.
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