El
avance en la vacunación en España, con más de 50 millones de dosis administradas hasta el momento, ha permitido f
lexibilizar los requisitos en la realización de cuarentenas de contactos estrechos con nuevos positivos Covid-19. Sin embargo, el peligro que suponen las nuevas variantes del virus amenaza la laxitud de los protocolos trazados por el Ministerio de Sanidad en este punto de la pandemia.
De esta forma, las personas que hayan
pasado la enfermedad, con prueba de confirmación, en los últimos
180 días starán exentas de realizar la cuarentena si tienen
contacto directo con un infectado por Covid-19. Sin embargo, si se sospecha la
implicación de una variante, diferente a la británica, en el contagio, el
aislamiento será, por contra obligatorio. Esto significa que si el positivo guardia relación con las variantes
sudafricana, brasileña o la Delta, consideradas de mayor impacto para la sanidad pública, el
contacto estrecho deberá aislarse durante 10 días, según dictamina la última actualización del 'Procedimiento de actuación para el Servicio de Prevención en Riesgos Laborales frente al SARS-CoV-2".
También deberán realizar cuarentena aquellos casos en los que se sospeche una
transmisión a partir de visones. Ante cualquier caso sospechoso, el documento aconseja iniciar la identificación de sus contactos, aunque, si la sospecha de caso se descarta,
se suspenderá la cuarentena de los contactos. El sistema de Prevención de Riesgos Laborales deberá investigar y analizar las
causas de los brotes: medidas organizativas inadecuadas o no implantadas, incumplimiento de las distancias de seguridad, instrucciones en idiomas que no se comprenden, mascarillas inadecuadas, mal uso de las mismas, movimientos del personal, reuniones, descansos, espacios comunes, etc.
Vacunados y trabajadores esenciales, también exentos
En concordancia con la Estrategia de detección precoz, vigilancia y control de Covid, los trabajadores que hayan recibido una
pauta de vacunación completa y sean consideradas como contacto estrecho
tampoco estarán obligados a guardar cuarentena si utilizan EPIs adecuados y siempre y cuando los contagios no estén
vinculados a las variantes Beta y Gamma. Algo complicado, reconoce Sanidad, ya que la información sobre variantes normalmente no está disponible al inicio del diagnóstico, por lo tanto "únicamente podrá realizarse cuarentena si se dispone de esta información de forma oportuna".
En el caso de los centros sanitarios se tendrá en cuenta la unidad hospitalaria en la que desarrollan su actividad asistencial (unidades hospitalarias con pacientes especialmente vulnerables como por ejemplo hematología, UCI, oncología o unidades de quemados) pudiendo valorar cada caso si es necesario.
Además, según fija el documento, se les hará seguimiento con PCR preferiblemente y, si no fuera posible, con otra PDIA. Idealmente se realizarán dos pruebas, una al inicio y otra alrededor de los 7 días del último contacto con el caso confirmado. Así mismo, aunque no haya aislamiento, se aconseja utilizar mascarilla en las interacciones sociales y no acudir a eventos multitudinarios.
Tampoco se exigirán cuarentenas a los contactos que realicen trabajos esenciales. En determinadas situaciones, las comunidades podrán establecer pautas de seguimiento específicas para estas personas.
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