Han sido los ojos de esta
pandemia. También el altavoz al contar lo que estaba pasando dentro y fuera de los hospitales. Su
testimonio en primera línea ha servido para hacer al mundo consciente de la enorme repercusión que estaba teniendo el virus llegado hace ahora un año a España.
Por ello no es de extrañar que los
profesionales sanitarios, situados en el foco mediático durante meses, hayan copado horas de
radio y televisión y portadas de
periódicos día sí, y día también. En las
redes sociales, aluviones de 'likes' y seguidores han acompañado sus fotos, opiniones y contenidos más virales, convirtiéndose en estrellas de plataformas como Twitter, Instagram o
TikTok.
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Una fama 'efímera' y ligada a la pandemia que puede no tardar en desaparecer. En otro contexto, esto podria ser visto como algo negativo. Sin embargo, en
tiempos de Covid-19 puede ser considerado incluso como una
"buena noticia". "Que se deje de hablar de ellos" será síntoma de que el problema que ellos tratan "ha desaparecido", explica Pedro Rodríguez, especialista en psicología clínica a
Redacción Médica.
Como psicológo y miembro de la Junta del
Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid, Rodríguez descarta que este 'apagón' de popularidad pueda afectar al colectivo del alguna manera, salvo casos "puntuales de narcisimo" que tienen más que ver con estructuras de personalidad que con la profesión.
Otras vías de visibilización
"Aquellas personas que se vean afectadas puede que tengan un
problema de personalidad pero la mayoría estarán
encantados de no tener que salir a la palestra para contar esta crisis", detallaba el experto, convencido de que los colectivos sanitarios tienen "
muchas otras maneras de visibilizarse en la sociedad" y una "gran mayoría hubiera preferido que esto no hubiera pasado".
"La pandemia nos ha servido para recordar la
importancia de la Salud Mental, pero como colectivo ya sabíamos las carencias que había. Cuando pase, en la medida en la que no estén cubiertas esas necesidades, se seguirá reivindicando desde las distintas instancias profesionales", opina.
Aunque el efecto es bueno, la forma no siempre es la adecuada, explica Rodríguez, aludiendo a una catástrofe como el
11-M. "Tuvo un efecto de visibilización y puso de manifiesto la necesidad de los profesionales de la psicología pero maldita sea", explica, asegurando que nadie "quiere que pase nada con tal de que su profesión esté más en el foco".
Como parte positiva sí que destaca la
"confianza" depositada en la ciencia y en los profesionales ante la "incertidumbre" generalizada que ha provocado esta crisis. Su "verdadero deseo" es poder volver a abrir consultas, quirófanos, diagnosticar precozmente, reducir listas de espera..."Que el Covid-19 no despiste la atención de otras patologías".
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.