El presidente del Gobierno,
Pedro Sánchez, ha presentado este jueves en La Moncloa el
Plan para reforzar el sistema de Ciencia, Tecnología e Innovación, una medida basada en tres ejes que no está compuesta solo por "buenos propósitos", como ha remarcado el presidente, sino que lleva asociado un considerable
aumento de la financiación. Así, entre 2020 y 2021 se invertirán 1.056 millones de euros en ayudas directas al sistema de ciencia e innovación y 508 millones en créditos a empresas innovadoras, a partir de los nuevos instrumentos de
promoción de la I+D+I privada.
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Este Plan de choque por la Ciencia y la Innovación contempla inversiones por importe de 1.056 millones de euros, de los que
396,1 millones se movilizan este año y el resto, en 2021. El presupuesto se va a canalizar a través de ayudas directas al sistema de ciencia e innovación, tanto a las
instituciones científicas como a la I+D+I de sectores empresariales estratégicos. A esta inversión hay que sumar 508 millones de euros en préstamos en condiciones ventajosas a empresas innovadoras, a partir de los nuevos instrumentos de promoción de la I+D+I privada.
El presidente ha querido comenzar su discurso
agradeciendo el trabajo de la comunidad científica durante los peores momentos de la pandemia de Covid-19. "Diariamente recibíamos el aporte y asesoramiento de manera transversal y horizontal", ha remarcado, añadiendo que los investigadores han ayudado al Gobierno a "entender las implicaciones de las decisiones que hemos tomado".
Sánchez ha destacado la "extraordinaria formación" de los investigadores españoles, de los que también ha resaltado el "alto sentido del deber", su "humildad" y "compromiso", así como la "consciencia de las limitaciones de la Ciencia para enfrentarnos a un virus desconocido" como el Covid-19.
"No había pronunciamientos categóricos", ha resaltado el presidente en relación a los consejos recibidos los últimos meses para abordar la pandemia
. "Si algo demuestra este plan es que el Gobierno ha comprendido y aprendido la importancia de la Ciencia", ha admitido Sánchez, afirmando que España no puede continuar dándole la espalda.
"Si queremos estar preparados para futuras crisis sanitarias" y "tomar medidas que aseguren la salud, el bienestar, la competitividad, la cohesión y la sostenibilidad", así como crear empleos o una sociedad más justa, "
tenemos que apostar por la Ciencia", ha insistido, destacando las restricciones presupuestarias y la ausencia de la atención política que ha sufrido la comunidad científica los últimos años.
Un plan basado en tres ejes
El plan, ha señalado, se basa en tres ejes principales. El primero, dotado con 215,9 millones, está centrado en la necesidad de potenciar la innovación e investigación en salud, aumentando los
recursos para el Instituto de Salud Carlos III y reformando la Ley de Investigación Biosanitaria para favorecer la carrera de investigadores y el apoyo al talento joven.
Entre las medidas acordadas, se incluyen 6 millones de euros para reforzar el Centro Nacional de Microbiología y el Centro Nacional de Epidemiología y el
incremento en 50 millones de euros de los fondos destinados a la convocatoria de proyectos anual de la Acción Estratégica en Salud.
Además, se va a impulsar la
Estrategia de Medicina Personalizada para mejorar la prevención y el tratamiento de enfermedades. Su lanzamiento comenzará en el segundo semestre de 2020 y contará con
77,3 millones de euros. Uno de los planes que incluye se refiere a la creación de un Centro Estatal de Terapias Avanzadas, orientado a la investigación, desarrollo y potencial fabricación y distribución en el Sistema Nacional de Salud de terapias avanzadas personalizadas.
También contempla el refuerzo de las instalaciones de alta seguridad biológica, en especial las del Centro de
Investigación en Sanidad Animal del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (CISA-CNIA), con una inversión directa de 29 millones de euros.
Estabilidad para los científicos
El segundo, con un presupuesto de 523,5 millones, tiene como objetivo resolver las deficiencias del sistema de la Ciencia, dotando de estabilidad a la carrera de los científicos y destinando fondos a proyectos, contratos de investigadores y equipamiento e infraestructuras.
En concreto, se incrementará en 50 millones (hasta los 412, es decir un 14 por ciento más), la cuantía de la convocatoria de proyectos de I+D+I en 2020 y 2021; se crea una
partida de 60 millones de euros para adquisición de pequeño equipamiento científico y se lanzará otra convocatoria de equipamiento científico-técnico en 2021 con 120 millones de euros.
Asimismo, se amplían las ayudas para
prórrogas de contratos de la Agencia Estatal de Innovación para incluir a aquellos que no fueron beneficiados del primer paquete que se aprobó en el Real Decreto-ley 11/2020, de 31 de marzo. Se calcula que esta medida,
con un coste estimado de 20 millones de euros, beneficiará a más de 3.200 investigadores e investigadoras.
Préstamos a empresas innovadoras
Por último, un tercer eje, con un presupuesto de
317 millones y otros 508 millones en préstamos a empresas, busca reforzar las bases del tejido productivo impulsando la I+D+I.
Se pone en marcha un plan a tres años para duplicar las ayudas a la I+D+I empresarial, a través del nuevo
Plan Estratégico de la Agencia de Innovación CDTI, hasta alcanzar los 2.156 millones de euros anuales.
Este eje también incorpora un programa de ayudas directas a PYMEs innovadoras para que puedan madurar su tecnología y su modelo de negocio y afianzar su estructura de cara a su posterior escalado.
Comenzará con un piloto en 2020, con diez millones de euros, y continuará con 50 millones en 2021.
Además,se añade otro programa de apoyo a PYMEs innovadoras que promoverá la compra de prototipos a entidades y centros de investigación y tecnología que quieran desarrollar startups. Se desarrollará en 2021 con una
inversión prevista de 50 millones.
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