La
pandemia del coronavirus Covid-19 en España, un virus todavía hoy desconocido, ha puesto sobre la mesa la rápida actuación sanitaria para encontrar la mejor cura. Aunque los
tratamientos que se han utilizado en el país desde el principio han estado focalizados en
tres pilares (terapia antiviral, terapia antiinflamatoria y tratamiento antibiótico), lo cierto es que han ido evolucionando y
no son los mismos.
Así lo explica a
Redacción Médica Germán Peces-Barba, vicepresidente neumólogo de Separ (Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica), quien indica que a los anteriores también hay que sumarles la inclusión de tratamientos
antitrombóticos o anticoagulantes, así como fármacos diana mediadores de la inflamación y
vitamina D, cada uno de ellos con su propia evolución a lo largo de estos meses desde que comenzó la pandemia.
De la misma manera lo indica a este medio
José Manuel Ramos Rincón, coordinador del Grupo de Enfermedades Infecciosas de la SEMI, quien también señala que el tratamiento también ha variado ligeramente según el hospital y el grupo clínico.
En cuanto a la terapia antiviral, se ha venido utilizando desde el principio antivirales aunque sin una demostración muy sólida de que funcionen. En el inicio se empezó a utilizar
hidroxicloroquina y cloroquina que, comenta el experto, "tienen algunos datos a nivel experimental
contra la replicación del virus, así que se han utilizado bajo este soporte de baja evidencia".
También se empezaron a utilizar
antivirales "de tipo anti
virus del sida como
ritonavir o remdesivir, éste último no estaba disponible en España y solo podía ser bajo autorización expresa de los centros que estaban en un ensayo clínico de este fármaco". Peces-Barba manifiesta que se utilizan sin que ninguna tenga evidencia, aunque
remdesivir sí que había mostrado resultados favorables en ensayos.
Coronavirus tratamientos: evolución de antivirales y antiinflamatorios
Sobre los
antiinflamatorios, en un primer momento los
corticoides empezaron a utilizarse en los pacientes que estaban muy graves y
cerca de llegar a la UCI con dosis no intensas. Esto ha cambiado, ya que ahora se usan desde las primeras fases de la hospitalización con pautas muy variables:
desde dosis altas una vez al día a dosis programadas leves cada 8-12 horas.
Con el tiempo se han incluido en los tratamientos para la Covid-19 unos
fármacos diana mediadores de la inflamación, que en un principio también se reservaban para los
casos más graves.
Lo mismo ocurría al principio con
antitrombóticos y anticoagulantes, que "ahora mismo se usan de entrada en todos los casos que se hospitalizan e incluso en algunos casos en los que los pacientes se pueden ir a casa bajo una estrecha vigilancia". Son
heparinas subcutáneas, que es como se conocen de modo general.
Por su parte, los antibióticos se han venido utilizando desde el principio debido a que "las infecciones virales salen con frecuencia asociadas a infecciones bacterianas". Lo que ha ido cambiando ha sido los nombres. Por ejemplo, inicialmente tuvo mucha penetración el uso de la
azitromicina, que luego se descartó por falta de evidencia.
La
vitamina D se empezó a utilizar desde la parte media-final como preventivo de complicaciones por las
altas dosis de corticoides y para evitar osteoporosis.
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