El
presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este sábado que la
desescalada del confinamiento será "asimétrica" en España. Es decir, se
levantará el confinamiento antes en unos territorios que en otros.
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Pedro Sánchez ha explicado que
"la respuesta a la pandemia debía ser homogénea" para atajar la propagación en aquellos territorios donde más fuertemente estaba golpeando. Eso ha hecho que otros territorios, donde la pandemia no había impactado de manera tan fuerte, tengan un pico de contagios menos pronunciado que otras comunidades autónomas.
Es por ello, como ha explicado el presidente, que "la desescalada
no tiene por qué conllevar una misma respuesta en todo el territorio". Además, Sánchez ha explicado que la desescalada
no tiene porque ser igual dentro de una CCAA, ni siquiera dentro de una
provincia.
No obstante, el presidente del Gobierno ha sido muy claro indicando que todavía "
no hemos entrado en fase de desescalada". Las cifras de contagios actuales no permiten iniciar esta fase.
Proceso previo a la apertura del confinamiento
A partir del
27 de abril se aliviará el confinamiento de los niños. Sin embargo, Sánchez ha dejado claro que "se trata de un
pequeño alivio en la regla general del confinamiento"
y hasta que España no cumpla con los
6 criterios marcados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para una correcta desescalada cuando el país empiece a abrir el confinamiento.
Los
seis retos que tiene España por delante son: la
transmisión debe estar controlada, el sistema de salud deberá realizar
test para detectar y controlar cada caso, el deber de tener bajo control los
lugares con mayor riesgo de infección (hospitales y residencias de mayores), la
implantación de un sistema de control de personas para evitar contagios importados, llevar a cabo
medidas preventivas en centros de trabajo y educativos y dotar a la población de información completa sobre reglas de higiene y distancia social.
Sistema de marcadores para iniciar la desescalada
Una vez que España cumpla con estos criterios, el presidente ha explicado que el Gobierno se guiará por un
sistema de marcadores que "nos va a advertir en cada territorio del
nivel de propagacion del virus y de
l vigor de nuestro sistema de salud".
Ambos elementos son los que van a determinar el levantamiento del confinamiento en uno u otro territorio. Sánchez tampoco descarta que en un futuro, de detectarse un rebrote,
haya que volver a reforzar el confinamiento.
La desescalada irá de la mano de un
pacto de Estado en el que el presidente quiere contar con todos los partidos politicos, autoridades territoriales y agentes sociales. Sánchez ha indicado que uno de los pilares de este pacto será un
plan para reconstruir y reforzar el sistema sanitario español.
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