Cirugía capilar en Turquía, "un negocio donde importa poco el paciente"

Se aproxima el verano, estación que muchos aprovechan para librarse definitivamente de aquellos complejos físicos que todo el mundo tiene, pero que para algunas personas suponen un auténtico impedimento, incluso a la hora de relacionarse con los demás.

Las noticias sobre operaciones quirúrgicas son bastante comunes en estas fechas. Desafortunadamente, igual que hay casos de éxito, también los hay de fracaso. No todas las clínicas cuentan con los profesionales y con los medios adecuados para completar la operación de estética sin afectar negativamente a la salud física, y también psicológica, del paciente. Un indicio que puede ayudar rápidamente a detectar aquellas clínicas que no cuentan con los preparos pertinentes es el coste de la operación. Sin embargo, aún hay quien deposita su confianza en tratamientos excesivamente baratos, porque la alternativa -aunque implique tener cierta garantía de éxito- es pagar más. Ante esta situación, son bastantes quienes optan por operarse fuera de España. De hecho, Turquía es uno de los países referentes para los españoles que quieren someterse a una operación de estas características.

Las operaciones de adelgazamiento y las de injerto capilar se requieren con bastante frecuencia. Turquía se constituye, por tanto, como destino de turismo sanitario para los españoles. La mayor parte de las personas que viajan a este país lo hacen para recibir tratamiento quirúrgico, especialmente operaciones gástricas e implantes capilares. Así se informa en la propia página web del Estado, en la sección del Ministerio de Asuntos Exteriores. No todas las operaciones que se desarrollan en Turquía acaban en desgracia, pero sí algunas de ellas, como las cuatro muertes que se han producido en los últimos meses y sobre las que el Ministerio de Asuntos Exteriores alertó el pasado miércoles, 12 de abril. Desde la web del gobierno, se insta a los ciudadanos españoles a que "analicen cuidadosamente tanto a los establecimientos como a los facultativos que vayan a realizar la operación". También inciden en que el paciente tenga muy presente que son clínicas que prestan estos servicios quirúrgicos a cambio de un beneficio económico.

Los fallecimientos por operaciones mal realizadas en Turquía no son algo que sólo afecte a los españoles, sino que también perjudican a los ciudadanos de otros países próximos. El doctor Juan Andrade, desde España, advierte del peligro que puede entrañar viajar a Turquía para hacerse allí una operación estética. Por eso, incide en que España ya cuenta con clínicas correctamente homologadas.

Conociendo al doctor

El Dr. Andrade cuenta con una experiencia que inició en clínicas capilares privadas y culminó con la apertura de su propio centro capilar en Madrid (España). El centro donde ofrece sus servicios está reconocido oficialmente por la International Society of Hair Restoration Surgery, una organización no lucrativa que regula a escala internacional los tratamientos médicos relacionados con la pérdida de cabello. En la propia página web de la ISHRS, se puede encontrar al médico adecuado buscando por país y ciudad. Por ejemplo: si se pone "España" y "Madrid", el primer resultado que sale es "Juan Manuel Andrade". Esto ya es una garantía en sí misma de que la persona es un auténtico experto profesional en su campo, con sus competencias reconocidas a escala internacional. Cabe destacar que también pertenece a otras sociedades de prestigio internacional como son: la Sociedad Iberolatinoamericana de trasplante de cabello; La World Fue Institute, de la cual es Fellow Member, y la Medical Council of Canada. A lo largo de su trayectoria de 10 años en clínicas privadas, el Dr. Andrade ha atendido a más de 7.000 pacientes en su actual establecimiento: la Castellana Clinic. Previamente a la apertura de su clínica, ha trabajado y se ha formado en países como: Bogotá, Canadá, Dubai, Israel, Estados Unidos, Reino Unido, España, República Checa, Polonia, Argentina, México, Paraguay, Malasia, Bélgica y Tailandia entre otros tantos.

¿Por qué supone un mayor peligro someterse a una operación estética en Turquía?

El principal riesgo se encuentra en la proliferación de empresas que, en vista del éxito que tiene Turquía como destino sanitario para muchos países (España incluida), ofrecen servicios de operaciones estéticas a precio bajo sin ser clínicas debidamente acreditadas por las autoridades turcas. Internet facilita, además, caer en la trampa, ya que estas clínicas cuentan con páginas web de apariencia profesional y correcta configuración. Cabe tener en cuenta que el turismo sanitario en este país supone ingresos de veinte mil millones de euros al año.

¿Cuáles son los beneficios de realizarse un injerto capilar en España?

Castellana Clinic, como establecimiento sanitario ubicado en España, se constituye como un referente por sus beneficios:

• Primero, se trata de una clínica pionera en la aplicación de la técnica FUE, desarrollada desde hace más de 10 años y perfeccionada en la clínica del Doctor Andrade con el uso de material quirúrgico de última generación en buenas manos. Esto permite proteger la zona donante y la implantación técnica DHI. Esta técnica se desarrolla de principio a fin exclusivamente por el Dr. Andrade.
• Se ofrecen primeras consultas gratuitas, tanto online como presenciales, por el equipo de médicos del Dr. Andrade.
• Está la garantía de que la intervención la realiza de principio a fin el Dr. Andrade.
• El resultado de la operación es muy natural.
• Se incluye un seguimiento posterior personalizado: el paciente habrá de volver a la clínica durante un cierto tiempo, para comprobar la evolución del resultado.

¿Qué medidas de seguridad deben tomarse en cuenta antes de someterse a una operación estética en el extranjero?

En primer lugar, lo más conveniente es valorar la operación en el propio país, en lugar de recurrir al extranjero. Un motivo, aparte de la seguridad sanitaria como tal, es la comodidad de gestionar la burocracia en España, sin profesionales que hayan de intervenir entre ambos países. Ahora, si se decidiera hacer la operación en el extranjero, sería conveniente informarse de la acreditación sanitaria de la clínica médica. Una buena forma de comprobar su homologación es recurrir al buscador online que ofrece la página web de la ISHRS, donde se muestra al profesional homologado en el país, acompañado de la clínica donde presta sus servicios y respaldado por su trayectoria profesional (que se refleja en el currículum).

El Dr. Andrade indica:

"Me parece importante enfatizar que el problema de las clínicas low cost, sin un control (ni sanitario ni de la publicidad engañosa), también ha llegado a España. Hemos observado y estudiado a través de las diferentes sociedades de cirugía capilar que, en el área jurídica (como sucede con algunas empresas), el afán de captar pacientes hace que predomine más en ellos las prácticas de competencia desleal, que además promueven el intrusismo laboral, ya que la mayoría de estas clínicas contratan a un médico titular que con su registro médico respalda sin conocimiento ni experiencia la práctica del acto quirúrgico a través de técnicos en quienes recae directa y totalmente la responsabilidad de todo el procedimiento, tanto médico como de los medios de asepsia y antisepsia.

Los pacientes pasan en algunos casos por el acto quirúrgico sin ningún tipo de estudio preanestésico, poniendo en grave peligro su vida, si se tiene en cuenta que una emergencia médica o una contaminación masiva podría surgir de estos actos quirúrgicos irresponsables. Porque... ¿cómo pediríamos a una persona que, bajo un título de técnico capilar de 1 o 2 meses, tenga la responsabilidad que, por el contrario, sí tendría un médico especializado?

Además, estos técnicos van de clínica en clínica como freelancers sin ningún tipo de compromiso ni con el paciente ni con la buena praxis, porque no la tienen, y además no conocen al paciente ni antes del procedimiento, y mucho menos saben del resultado, porque al final esto sólo involucra a la clínica que los contrata y esto se traduce en un daño irreparable en nuestros pacientes.

Estos técnicos capilares no tienen el más mínimo conocimiento de nada que tenga que ver con la Medicina, y su mal llamada experiencia sólo la utilizan para ver la cirugía capilar como un negocio en donde el menos importante es el paciente. Porque cabe además recordar, en este intrusismo profesional, la importancia y el valor del hecho de que un médico haya invertido 6 años formándose como médico general, y luego, como mínimo, 3 o 4 años para tener el bagaje suficiente para realizar un procedimiento en condiciones. Además, a esto hay que sumar la colegiatura médica; los seguros de responsabilidad civil; los costes derivados de las diferentes sociedades nacionales e internacionales, que no sólo son quienes finalmente avalan al cirujano, sino que además la educación médica continuada permite la obtención de mejores resultados en nuestra práctica diaria.

No quiero pasar por alto el grado de descaro al usar una publicidad engañosa con términos tan poco creíbles y éticos como unidades ilimitadas, garantía de por vida y un sinfín de términos que lo único que hacen es confundir y engañar a nuestros pacientes.

Quiero finalizar señalando que estas clínicas utilizan esta mala praxis y al contratar personal no cualificado les permite llegar a unos precios irrisorios, con lo que finalmente culminan su competencia desleal".