Jesús Vicioso Hoyo / Carlos Cristóbal / David García / Imagen: Miguel Fernández de Vega y Cristina Cebrián. Madrid
El ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, ha dado detalles sobre las intenciones del Gobierno de devolver la atención sanitaria a los inmigrantes irregulares.
Alonso ha recordado que a pesar de que el asunto no estaba en el orden del día del Consejo Interterritorial de este miércoles, se ha tratado en el turno de ruegos y preguntas a petición de las comunidades socialistas.
El ministro ha explicado que existe ya un documento de acuerdo con las CCAA al que se llegó el pasado 14 de julio (aún con los gobiernos autonómicos salientes, según declaraciones de Rubén Moreno, secretario general de Sanidad) y en el que se acordaron las condiciones que deben reunir los inmigrantes para acceder a la atención sanitaria.
A este respecto, Alonso ha dejado claro que “descarta dar tarjeta sanitaria” y que esta decisión salvaguarda un supuesto del RD 16/2012 como es “cerrar la puerta al turismo sanitario” que según él costaba a las arcas del SNS unos mil millones de euros al año. Así, ha desvelado que existe un grupo de trabajo del ministerio en este sentido que lleva las conclusiones de sus informes a la Comisión de Prestaciones.
“Hay que buscar el equilibrio”, ha declarado Alonso, en referencia a la atención en Atención Primaria para estos ciudadanos y no abrir de nuevo la puerta al turismo sanitario. Por eso, ha indicado, habrá un documento que posibilite su acceso a la Atención Primaria e incluso a la Especializada si así lo considera el médico de familia. En cuanto a los medicamentos y a la farmacia, este documento les permitiría su acceso por un 40 por ciento del coste, o un 10 por ciento si es de tipo reducido. Para ello deberán estar empadronados al menos un año y no se les cubrirá la asistencia si se van a otro país. Todos estos requisitos, ha insistido el ministro, han sido consensuados con las CCAA.
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Alfonso Alonso explica cuál es la postura de su departamento sobre la atención a inmigrantes irregulares.
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Lo que se quiere evitar, según ha explicado Alonso, es que ciudadanos de la Unión Europea residentes en España puedan tener también tarjeta sanitaria y por tanto el SNS tenga que costear su atención sanitaria tanto en nuestro país como en sus países de origen.
Los documentos de conclusiones (que también han pasado por el Ministerio del Interior) serán elevados al próximo Consejo Interterritorial.
Alonso ha detallado también que actualmente hay 185.000 inmigrantes irregulares que sí tienen ese derecho a la atención sanitaria por ser menores de edad o mujeres embarazadas y se ha mostrado tranquilo de que las comunidades ya les están atendiendo.
Por último, el ministro también ha hecho referencia a las peticiones socialistas sobre asunto de la universalización de la sanidad. “El PSOE lo relaciona con el RD 16/2012”, ha dicho, además de precisar que “hemos tratado de rebajar el tono de este debate”. A este respecto ha recordado además que se van a “salvaguardar las bondades del RD 12/2012 que son fundamentalmente dos: garantizar la asistencia sanitaria a españoles que no la tenían (profesionales liberales, parados de larga duración…) y cerrar la puerta al turismo sanitario”, y ha descartado así su derogación.
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