El ‘gran’ plan que tiene el Gobierno para reducir la temporalidad en todos los sectores de actividad estratégicos (sanidad entre ellos) es el de convocar una gran
Oferta Pública de Empleo (OPE) a nivel nacional, con la que
conseguir rebajar la precariedad entre los funcionarios al mínimo.
En el caso de sanidad, el
Ministerio de Hacienda ha planteado
una convocatoria para cubrir cerca de 130.000 plazas, con la que pretende rebajar la
temporalidad en este campo –que supera el 30 por ciento- al 8 por ciento. Para ello, el Ejecutivo pretende convocar una OPE a nivel nacional (con misma fecha de celebración, mismo examen, mismos temarios y baremos homologados) y poder desarrollarla, a ser posible, en un plazo máximo de tres años.
Ante esta ‘suculenta’ oportunidad, ¿pueden todos los profesionales sanitarios presentarse a esta oferta, tanto eventuales como interinos? La respuesta es clara: sí, tal y como explica
Antonio Cabrera, secretario general de FSS-CCOO, a
Redacción Médica. “Todos los trabajadores sanitarios que cumplan los requisitos mínimos, pueden acudir a esta convocatoria”, alega el líder sindical, en referencia a criterios como ser mayor de 18 años, tener nacionalidad española y la formación necesaria para poder presentarse.
Sin embargo, como es habitual en este tipo de procesos, la experiencia es un ‘plus’ que cuenta bastante y ofrece puntuación añadida en el resultado final. Por ello, a pesar de poder presentarse cualquier candidato, “los
empleados de larga duración tienen mayor posibilidad”, según Cabrera. Es decir, que el tiempo de trabajo en la Administración, especialmente si es superior a tres años, es clave en este tipo de procesos, independientemente de si el candidato es interino o eventual. “Hay profesionales sanitarios que, por culpa de las
restricciones de las tasas de reposición a partir del año 2010, no pudieron pasar a ser interinos, pero lleva tiempo acumulados en sanidad de años”, asegura.
Con la convocatoria de esta OPE nacional, el Gobierno espera
acabar con la precariedad en el 90 por ciento de las plantillas sanitarias de este país, siguiendo así las directrices europeas marcadas el año pasado.
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