Los presupuestos de 2012 trajeron el
aumento de la jornada laboral de 37,5 horas a los trabajadores públicos como medida de ahorro. Sin embargo, las circunstancias han cambiado y son varias las regiones que han peleado por volver a las 35 horas semanales.
Castilla-La Mancha fue pionera en esto. Sin embargo, la fuerte oposición del Gobierno central hizo que la medida solo durase cuatro meses. El 6 de mayo el Tribunal Constitucional admitía a trámite el recurso del Gobierno contra la vuelta a las 35 horas por invasión de competencias e imponía la suspensión cautelar de la nueva jornada.
Una suspensión que se hizo definitiva el pasado 30 de septiembre, cuando el alto tribunal dio definitivamente la razón al Gobierno central.
Del mismo modo,
Euskadi vio el pasado 27 de diciembre cómo el Tribunal Superior de Justicia de la región tumbaba la jornada de 35 horas, que llevaba activa desde febrero. Por ello,
el Gobierno vasco ha recurrido al Supremo declarando que no anulará la jornada hasta que éste se pronuncie. En
Andalucía, los funcionarios sanitarios la recuperarán a partir de enero, tras el acuerdo al que se llegó en la Mesa Sectorial. De hecho, el Gobierno andaluz mantendrá un encuentro con
Mariano Rajoy acerca de este tema y se espera que el modelo andaluz sirva de ejemplo para el resto del Estado. Así,
Andalucía, a diferencia de las dos anteriores, ha tomado la delantera en regresar a esa jornada sin que los tribunales se metan de por medio, enmarcada también en un tiempo político distinto, de necesidad de pactos, que probablemente forzó la abstención del PP en la Cámara autonómica.
Entre las que han dado pasos mucho más tímidos hacia la recuperación de la jornada previa a los ajustes de la anterior legislatura encontramos
Asturias, donde la Junta General aprobó en marzo una PNL para ello. La propuesta fue presentada por Podemos y salió adelante con los votos a favor del PP, entre otros. El PSOE, paradójicamente, votó en contra. El Gobierno regional ha mostrado recientemente su disposición a tratar con los sindicatos la vuelta a las 35 horas, pero recordando los problemas de Castilla-La Mancha y la prioridad de la “normativa básica estatal”.
Mismo argumento se postula en la
Comunidad de Madrid, donde la Asamblea aprobó una propuesta presentada por Podemos, con los votos del PSOE y Ciudadanos, pero el Gobierno regional recordó que la duración de la jornada es competencia estatal. El Ayuntamiento de Madrid, en cambio, sí ha aprobado la vuelta a las 35 horas de sus trabajadores, entre ellos los del Samur, ante la cual el Gobierno central ha recurrido.
Comunidad Valenciana, que mantiene un Ejecutivo liderado por el PSOE pero en acuerdo con Compromís, no ha pasado del nivel de una intención no formalizada, verbalizada únicamente a puerta cerrada en los encuentros con las organizaciones sindicales, según confirman fuentes a Redacción Médica. En
Extremadura, donde también hay una resolución de la Asamblea regional en este sentido, el Gobierno socialista asume que su compromiso electoral de devolver la jornada de 35 horas semanales es un “compromiso de legislatura”.
Una apuesta tímida
En
Castilla y León han sido las Cortes las que han instado al Gobierno autonómico a que recupere las 35 horas. Sin embargo, ha sido el propio consejero sanitario,
Antonio María Sáez Aguado quien ha recordado que ese cambio supondría para las arcas un aumento del gasto de 20 millones de euros, inasumible por el momento. En las
Islas Baleares existe una reivindicación por parte de los sindicatos pero no ha habido debate parlamentario ni manifestación por parte del Gobierno. Del mismo modo, en
La Rioja el silencio gubernamental ha sido patente, si bien el sindicato STAR ha comenzado este mes de diciembre una recogida de firmas para que su voz se escuche en instancias Ejecutivas. En
Murcia hay presión sindical contrarrestada con los argumentos de falta de presupuesto.
Hay comunidades en las que el debate sobre regresar a una jornada semanal de 35 horas ni siquiera se ha planteado. Es el caso de
Aragón, donde ni los partidos han planteado iniciativas ni los sindicatos parecen muy obsesionados con el tema. Mismo caso ha ocurrido con
Cataluña, donde “nadie está con ese debate”, según fuentes consultadas. Tampoco desde los sectores gubernamentales o sindicales
canarios y
cántabros se ha hecho demasiado para poner el debate sobre la mesa.
Las 'rara avis'
En
Galicia los trabajadores del sector sanitario nunca han tenido jornadas de 35 horas sino de 37, según ha destacado a Redacción Médica la secretaria general de Satse en la comunidad,
Carmen García. Pese a ello, en diferentes mesas e instancias de negociación se está reivindicando la implantación de esta, si bien no parece que haya habido avances tanto por parte del Ejecutivo ni en el Parlamento.
En
Navarra la aplicación del aumento de jornada apenas duró seis meses (1 de julio a 31 de diciembre de 2012). Se pasó de 1.592 horas/año a 1.628 y se realizó dentro de
“Medidas urgentes en materia de personal al servicio de las Administraciones Públicas de Navarra”. A partir de 1 de enero de 2013, en cuanto a cómputo horario del personal, los profesionales volvieron a las 1.592 horas anuales.
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