El nuevo presidente de la CEOE,
Antonio Garamendi, ha puesto sobre la mesa dos medidas para crear empleo “de calidad” en España: la
jubilación forzosa y continuar implementando jornadas con
horas extra, siempre de una manera remuneradas. Unas fórmulas que no han gustado nada al sector sanitario.
Redacción Médica se ha puesto en contacto con el sindicato de Enfermería, Satse, y con el sindicato médico, CESM, quiénes han criticado ambos puntos abogando por
la sobresaturación del sanitario como punto de inflexión para no hacer más horas extra, aunque sean remuneradas.
Gabriel del Pozo, vicesecretario general de CESM, explica que la idea de hacer más horas extra no es compatible con un ámbito como la sanidad. El sindicalista madrileño apela a la saturación del sanitario como punto de inflexión para “no dar más de sí”.
“La solución no es que el médico siga más tiempo. Tiene un
límite psicológico y cuando lo alcanza no puede atender a más gente. Puede verla, pero eso no es lo mismo que atender”, ha añadido. Gabriel del Pozo, además, critica que todo se quiera arreglar con “pagar más” al médico. “El
déficit de profesionales no se soluciona con dinero”, ha reivindicado.
En este sentido, el sindicato de Enfermería (Satse) considera que la mejor forma para dar respuesta a las necesidades que requiere un servicio sanitario es contar con las
plantillas enfermeras adecuadas, “no hacer trabajar más a los profesionales, aunque estas horas extra sean remuneradas”. “Por ejemplo, si se quiere hacer
intervenciones quirúrgicas por la tarde, hay que contratar a las enfermeras y los enfermeros necesarios para ofrecer este servicio”, ha puntualizado.
Jubilaciones forzosas: no
Respecto a la
jubilación forzosa a los 65, además de recordar que ambos colectivos están trabajando por
adelantar la edad de jubilación a los 60 (y hacerla más flexible
hasta los 70 en el caso de los médicos), las dos profesiones sanitarios creen que es “una locura” si se tiene en cuenta “la
falta de profesionales que vive en Sistema Nacional de Salud”.
Satse tiene un proyecto para adelantar la edad de jubilación y CESM propone una horquilla de 60 a 70 años
|
La propuesta puesta sobre la mesa por CEOE sobre la edad de jubilación supondría cambiar la
reforma laboral de 2012 que prohibió las jubilaciones forzosas acordadas en convenio (medida que ahora impulsa CEOE para evitar los pactos entre empresas privadas y trabajadores). Una modificación que no afecta directamente a los sanitarios pero que sí les abre camino en sus reivindicaciones. Tanto Satse como CESM tienen sobre la mesa proyectos de prejubilación, en el caso de CESM con una horquilla de 60 a 70 años.
Gabriel del Pozo critica que alguien esté planteando terminar con contratos de gente que quiere seguir trabajando cuando
“hacen falta médicos por todos los lados”. “No tenemos plantillas que cubran el
déficit que se va a generar en unos años por lo que no podemos pensar en, encima, prescindir de los que ya tenemos en activo”, ha puntualizado.
Por su parte, Satse tampoco ve bien esta medida de Garramendi propone para “permitir el relevo generacional”. En este sentido, el sindicato ha recordado su reivindicación de un
acceso voluntario a la jubilación anticipada a los 60 años “sin pérdida económica, para las enfermeras”.
“Satse entiende que las condiciones laborales especialmente duras y gravosas que sufren todos los profesionales de Enfermería a lo largo de su trayectoria profesional hacen que sea del todo lógico y razonable que puedan, si así lo desean, jubilarse antes de los 65 años”, han indicado. Aseguran que esta jubilación anticipada, además de beneficiar a los enfermeros y enfermeras que así lo deseen “sería también una medida que propiciaría el aumento de las plantillas enfermeras, al requerirse nuevos profesionales que sustituyan a los que se jubilan”.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.