Agosto suele ser un buen mes para el
empleo sanitario motivado por las bajas por vacaciones. No obstante, este verano el incremento ha sido menor que otros años y únicamente
ha sumado 16.631 altas. Quienes más han sufrido han sido los
médicos jóvenes que han visto triplicado el número de parados, según los datos publicados por el
Servicio Público de Empleo Estatal.
Mientras que en agosto de 2016 el número de
parados de graduados en Medicina era de 27, este año los desempleados registrados ascienden a 82. Los veteranos lo han tenido algo mejor: el paro se situaba en 1.183 personas entre los licenciados en Medicina, un descenso del 10,51 por ciento respecto al año anterior y una reducción de 40 parados respecto a julio de este año.
En cuanto a
Enfermería, el paro de los diplomados ha crecido en 30 personas respecto a julio, un aumento del 1,09 por ciento. Sin embargo, los 2.792 parados que hay actualmente entre los profesionales de Enfermería más veteranos son un 12,09 por ciento menos que los registrados en agosto de 2016.
Los enfermeros más jóvenes han visto reducido su desempleo en 57 parados, un 6,67 por ciento menos que en julio. En relación al año anterior, hay un 17,9 por ciento menos de graduados parados ya que actualmente hay 798 parados frente a los 972 de agosto de 2016.
Mal dato para Farmacia
Quien sí ha visto aumentar su paro tanto en jóvenes como mayores es el
sector de la Farmacia. Los licenciados han aumentado un 2,2 por ciento su paro hasta situarse en los 2.275 desempleados, un 9,18 por ciento menos que el año anterior.
En el caso de los graduados en Farmacia, el aumento ha sido de 46 parados, cifra que supone un incremento del 34,59 por ciento mensual y del 42,06 por ciento anual y que sitúa el paro entre este colectivo en los 179 parados.
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