La creación del
Espacio Europeo de Datos es una prioridad de la
Comisión Europea para 2019-2025. España ha mostrado su compromiso con esta iniciativa, que supondrá que las personas controlen sus datos sanitarios, tanto si se encuentran en su país de origen como en otro Estado miembro. Sin embargo, lo que no está claro son las prioridades de
cómo este espacio de datos debe funcionar para conseguir atender las necesidades de todos los pacientes.
En esta línea, la Comisión ha dado un paso al frente proponiendo un sistema de salud finlandés centralizado como modelo. Sin embargo, según ha apuntado la eurodiputada por Ciudadanos en el grupo Renew Europe del Parlamento Europeo,
Susana Solís, esta fórmula
“no es aplicable a países como España o Alemania”, en los que las competencias sanitarias las ostentan entidades autonómicas o regionales.
“En algunos Estados miembros altamente descentralizados, la información apenas está disponible a nivel nacional.
Los datos no son interoperables”, ha advertido la eurodiputada en un coloquio celebrado en el Parlamento Europeo, centrado en la oportunidad que se presenta para la digitalización de la Unión Europea y el despliegue de la Inteligencia Artificial en el sector salud.
La política ha instado a la Comisión a tener en cuenta los
diferentes grados de descentralización en los sistemas sanitarios de la UE al establecer este "importante"
Espacio Europeo de Datos Sanitarios, que supone un nuevo comienzo para la política sanitaria de la UE.
Por tanto, la apuesta de Solís es la de implentar un
modelo descentralizado “gestionado por los sistemas de salud pertinentes, instituciones, industrias e instituciones de investigación, de acuerdo con las normas fijadas por la autoridad nacional competente”.
Marco regulatorio del Espacio Europeo de Datos
La eurodiputada ha remarcado que los datos de salud de Europa son
“tan poderosos como los principales actores”, pero ha incidido en que la falta de un marco regulatorio armonizado puede conducir a una “disociación entre el Espacio Europeo de Datos Sanitarios, la Ley de Inteligencia Artificial y el Reglamento de Dispositivos Médicos”.
“Si logramos alinearlo,
será una gran victoria para nuestra industria. Seremos capaces de brindar certeza y claridad jurídica. La oportunidad para ser pioneros en el cuidado de la salud está ahí, simplemente tenemos que dar pasos hacia una mayor coordinación y armonización eficiente entre los sistemas nacionales”, ha continuado.
Asimismo, de cara al futuro, Solís ha señalado que algunos de los desafíos “clave” del sector de la salud son contar con un modelo para compartir información de salud protegida y
proporcionar a los profesionales sanitarios información "relevante", así como utilizar el potencial de los datos del Espacio Europeo para "reducir desigualdades".
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