El presidente de la Sociedad Española de Radiología Médica (Seram), José Carmelo Albillos, ha confirmado en
Redacción Médica que la ampliación del MIR de Radiología a cinco años, una de las principales reivindicaciones de la especialidad,
no podrá aplicarse a corto plazo por "cuestiones fundamentalmente económicas". La medida, que buscaba reforzar la formación de los especialistas ante el creciente número de pruebas diagnósticas y programas de cribado, queda así pospuesta.
Ante esta situación, la entidad apuesta por
reforzar la preparación de los futuros especialistas a través de diplomas y
Áreas Específicas de Capacitación (ACE). "Estamos trabajando de cara a obtener no solamente más profesionales, sino profesionales que estén muy cualificados en determinados temas en los cuales hay necesidades y que ahora mismo
no existe una oficialización de esa subespecialización", asegura.
Aumento de plazas MIR y subespecialización
No obstante, reconoce que no ha habido novedades en
la tramitación de ACE procedentes de Radiología, aún sabiendo que las candidatas a ser las primeras aprobadas en la sanidad pública
se ubican en Cardiología y Pediatría. "De grandes avances no ha habido un movimiento, digamos, perceptible. Seguimos un poquito estancados en la misma situación que hace unos meses", admite, haciendo referencia en concreto a la
ACE de Neurorradiología intervencionista que la sociedad ha solicitado al Ministerio de Sanidad y que, por tanto, es la que más camino lleva recorrido. "Esa es la que ahora mismo ha avanzado más, pero insisto, el que haya avanzado no significa que haya habido avances últimamente, sino que estamos en ello junto con el resto de sociedades implicadas, pero de momento está quieta.
No ha habido mayor avance", insiste.
Además, para Albillos, el aumento del número de plazas
MIR es esencial. "Aunque se ha aumentado en los últimos años, todavía
es insuficiente para cubrir las necesidades", afirma. También ha reclamado eliminar las trabas que impiden a médicos extranjeros formados en España quedarse en el sistema público: "Hay
residentes que hacen el MIR en España y no pueden quedarse en el sistema público por cuestiones de contrato o de permiso de trabajo. Muchos de ellos tienen que volver a sus países o irse a la privada".
Además, señala la fuga de talento nacional: "Incluso hay radiólogos españoles que se van al extranjero porque
las condiciones laborales son mejores, tanto en cuestiones económicas como en jornada o en conciliación laboral". En este sentido, aclara que hay que progresar para que la especialidad "sea atractiva y que no haya esta
diáspora de profesionales que se vayan a países de nuestro entorno".
IA y condiciones laborales
Albillos también ha aclarado que revertir esta situación porque se suma otro problema más: el miedo a
ser sustituido por la Inteligencia Artificial, lo que hizo que desde hace unos años "muchos estudiantes que habían acabado Medicina y querían entrar dentro de la Radiología se lo pensaran dos veces, porque supuestamente la tecnología iba a provocar la
desaparición de la especialidad". Sin embargo, aclara que la realidad ha sido muy distinta: "Se ha visto que nos ayuda y que
es imprescindible para el desarrollo de nuestro trabajo, pero que de momento no va a contribuir a que disminuyan los necesarios". Aun así, puntualiza que "todo el proceso de implantación de la IA tiene que estar tutorizado y supervisado".
A pesar de todo esto, Albillos confirma que la especialidad ha tenido
un desarrollo muy grande en sus competencias, lo que ha incrementado notablemente la demanda de especialistas: "Esto es tanto por el afianzamiento y la progresión de los programas de cribado, como por toda la parte de radiología diagnóstica y de procedimientos mínimamente invasivos". Y es que aunque la especialidad no presenta desempleo, Albillos ha asegurado que las nuevas generaciones buscan
mejores condiciones laborales y mayor flexibilidad: "Los radiólogos jóvenes seleccionan los trabajos que más se adaptan a las nuevas formas de vida. Los temas de conciliación tienen una importancia significativa".
Un déficit estructural
"No hay una generación espontánea de radiólogos, son los que hay", continúa el presidente de la entidad, que recuerda que este déficit "no viene de ahora, sino que es
algo que se arrastra desde hace bastantes años". Además, señala que "no solo faltan en el sistema público, sino en general" porque la especialidad ha tenido un desarrollo muy grande en sus competencias "por el afianzamiento y la
progresión de los programas de cribado, como por toda la parte de radiología diagnóstica y de procedimientos mínimamente invasivos".
A esto se suma el envejecimiento poblacional y la cronificación de muchas patologías, entre ellas el cáncer, que requieren "una precisión al diagnóstico adecuada y un seguimiento a largo plazo". Por esta razón, ha pedido una reflexión conjunta entre los profesionales y los responsables sanitarios. "El sistema público debe avanzar en flexibilidad y conciliación si queremos mantener el talento. Es una cuestión sobre la que debemos reflexionar todos, también los dirigentes de la sanidad pública", afirma.
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