La
Universidad de Valencia y el
Servicio de Protección Radiológica del Hospital La Fe de Valencia inician durante este mes de agosto un reto que se empezó a plantear desde la
Segunda Guerra Mundial, pero que todavía nadie aún ha logrado conseguir: Encontrar un tratamiento que proteja al
ser humano frente a las
radiaciones letales. Para ello, el
Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades ha apostado fuerte por esta investigación que durará un total de
tres años, momento en que ya se tendrán resultados finales y que aspira a conseguir que las personas sobrevivan tras la exposición a radiaciones ionizantes letales.
El principal arquitecto que dirigirá esta apasionante investigación en los próximos años es
José María Estrela, catedrático de Fisiología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valencia, que destaca en
Redacción Médica que “el principal objetivo que se persigue es una fórmula capaz de
proteger a los mamíferos frente a las radiaciones ionizantes y que pueda aplicarse 24 horas o más después de sufrir una irradiación a dosis letales”.
El principal motivo por el cual el ministerio ha concedido la financiación es fundamentalmente, tal y como explica el especialista, a que “ya se cuenta con
experimentos preliminares con una fórmula diseñada que demuestra que los ratones irradiados con radiaciones altas, y a los cuales se les trata 24 horas después de ser irradiados, al menos llegan a
sobrevivir tres meses”. Con este primer paso realizado, se aspira a “demostrar que esta supervivencia es a más largo plazo”.
"El proyecto ya cuenta con experimentos preliminares con una fórmula diseñada que demuestra que los ratones irradiados sobreviven tres meses"
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Para conseguir este objetivo, el equipo dirigido por Estrela analizará cuáles son los efectos que provoca la radiación” tanto en la
médula ósea como en el
tracto gastrointestinal y en el
cerebro, que son los
tres órganos más sensibles a las radiaciones ionizantes”. El principal investigador advierte de que la idea es forjar una estrategia que "permita al equipo de investigación eliminar laradiación en
un solo organismo a través de sus múltiples órganos”.
La investigación cuenta con "suficiente experiencia acumulada"
Estrela es consciente de que
someter a una persona a radiaciones letales no es factible para un
potencial ensayo clínico por las obvias limitaciones éticas y legales. Sin embargo, “una vez se consigan resultados con los estudios pre-clínicos en animales sometidos a radiaciones en el Hospital La Fe, cuando haya algún accidente en humanos la fórmula será un medio posible para salvar la vida". Otro argumento a favor de la investigación es que “ya se tiene
suficiente experiencia acumulada relacionada con la radio protección, donde existen métodos que han funcionado en ratones y se puede extrapolar al ser humano de forma directa”.
Los principales
estamentos que están más interesados en que se logren avances en este proyecto son los
militares y los
servicios civiles dedicados a la protección de la población en general ante cualquier accidente, tal y como confirma el experto: “Situaciones como las que se vivieron en
Chernóbil pueden volver a suceder, además de que hoy en día tenemos el
desastre de la guerra en Ucrania, donde todos los días se habla del peligro de que exista un accidente nuclear. El
uso limitado de armas con potencial radioactivo es algo que preocupa a las autoridades y con razón”.
"El uso limitado de armas con potencial radioactivo es algo que preocupa a las autoridades y con razón"
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El catedrático de la Universidad de Valencia aspira a que, a través de esta investigación, se consiga establecer “una medida protectora y eficaz tanto para
los militares como para la población civil. En setiembre de 2027 el proyecto estará terminado y se espera contar con resultados esperanzadores”.
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