"El XXII Congreso Nacional mostró la excelencia de la Psiquiatría española"

Tres días después de que el XXII Congreso Nacional de Psiquiatría, celebrado del 26 al 28 de septiembre en Bilbao, haya echado el cierre, su presidenta del Comité Organizador Local, Ana González-Pinto Arrillaga, explica a Redacción Médica las sensaciones que le han dejado el evento. A ella y a las cerca de 1500 personas que han participado o acudido a él. Y son buenas. 

A nivel personal, ¿qué sabor le deja el XXII Congreso Nacional de Psiquiatría?

Un sabor delicioso. En tres días hemos tenido tres debates, 21 simposiums, 27 encuentros con el experto, 16 proyectos de investigación pioneros, 9 cursos y 13 talleres de formación. Los MIR  han podido participar con 50 comunicaciones orales, y un total de 500 posters. Además ha habido un track del Cibersam con 40 presentaciones de investigadores de alto nivel.

¿Y a los congresistas?

El feed back que hemos obtenido de los asistentes ha sido muy bueno. Han venido cerca de 1500 personas a este congreso, un ocho por ciento más que en congresos previos. Además, el alto grado de participación y el gran número de propuestas han permitido que hayamos conseguido tres créditos más, pasando de 13 créditos de la UEMS a 16. Eso es beneficioso para la Psiquiatría y para su Congreso, ya que es un reflejo de su capacidad docente. Hay que reconocer el alto nivel de lo presentado, mostrando la excelencia de la Psiquiatría española.

Curiosamente hemos sido especialmente felicitados por las actividades sociales realizadas fuera del congreso como la conferencia de Edurne Pasabán, en la que destacó la fortaleza que se puede tener aún habiendo tenido un episodio depresivo; y por la carrera de Martín Fiz, que mostró un mensaje que creemos básico: el ejercicio físico nos ayuda a prevenir episodios depresivos y a mantener el equilibrio emocional. 

¿Está satisfecha con el resultado?

"Tuvimos especial cuidado en que pudieran participar mujeres y hombres, jóvenes y mayores"

Muchísimo. Desde el Comité Organizador y desde el Comité Científico tuvimos especial cuidado en que pudieran participar mujeres y hombres, jóvenes y mayores. Hemos conocido en profundidad los nuevos tratamientos antidepresivos que van a llegar en los próximos meses con mecanismos de acción que promueven la plasticidad neuronal. Tenemos datos concluyentes sobre la disminución de la mortalidad en psicosis con el uso de tratamientos de larga duración, y existen ya datos sobre la importancia de usarlos en las primeras fases de la enfermedad. 

También hemos podido comprobar como en todas las patologías se proponen tratamientos de estilo de vida que hoy sabemos que tienen un efecto antiinflamatorio, como dormir adecuadamente, hacer actividad física evitando el sedentarismo, y tomar dietas saludables estilo la dieta mediterránea.

Varios representantes de comunidades autónomas compartieron sus iniciativas o estrategias de prevención del suicidio. Y la guinda fue la conferencia inaugural de Lourdes Fañanás, en la que nos explicó el valor de los cuidados en la infancia, y la importancia de la plasticidad neuronal para poder intervenir tempranamente en el caso de que existan malos tratos. Todo ello desde la genética y epigenética, con un relato extraordinariamente docente.

¿Qué cree que ha aportado el Congreso a los participantes que han acudido durante estos tres días a Euskaduna?

Creo que además de aportar conocimiento, el Congreso ha sido un acto de encuentro y de debate. Creo que el congreso ha afianzado la confianza que tenemos en nuestra disciplina,y ha lanzado un mensaje social optimista con respecto a la enfermedad mental y las posibilidades de recuperación. La Psiquiatría es una rama de la medicina que cuenta con excelentes médicos, y con tratamientos eficaces que son capaces de disminuir el riesgo de suicidio y la mortalidad prematura asociada a la patología grave. 

¿Destacaría alguna conclusión entre todas a las que se ha llegado tras los debates, simposios y demás actos que han tenido lugar?

El suicidio se puede prevenir, y podemos aspirar a una esperanza de vida similar a la del resto de la población con los tratamientos adecuados.

¿Qué temas cree que han dado pie a que sigan desarrollándose en el XXIII Congreso Nacional en Oviedo?

Estoy segura de que en Oviedo seguiremos hablando de la prevención del suicidio, porque las estrategias autonómicas, donde las hay, están aún por desarrollarse. Y en Oviedo tendremos ya experiencia con los tratamientos para la depresión que van a llegar en los próximos meses, con unos mecanismos de acción revolucionarios.