“No responde a la verdad” y además está
“sacada de contexto”. Así responde
Ribera Salud a
la última información que El Español publica sobre la compañía, donde afirma que el grupo “desvía beneficios millonarios de hospitales públicos a espaldas de la Administración”.
En la noticia, el medio que encabeza
Pedro J. Ramírez afirma que Ribera Salud ha facturado un total de 10,6 millones de euros con una empresa intermedia llamada B2b Salud (una central de compras de medicamentos)
“sin que la Generalitat Valenciana tuviera conocimiento” de los hechos. Pero no solo eso. El periódico asegura que esta situación afecta a más de 636.400 pacientes potenciales que se amparan bajo los conciertos de Ribera Salud en la región.
Unas informaciones por las que la entidad sanitaria no solo muestra “su más profundo desacuerdo”, sino que además
tacha de “ejemplo flagrante de manipulación informativa”, por generales “un enorme daño reputacional”, tanto a sus profesionales como proveedores. “Por este motivo –continúa- Ribera Salud ha puesto el caso en manos de sus abogados para estudiar las acciones legales pertinentes”.
Ribera Salud publica la información aportada al medio
En este mismo comunicado oficial, Ribera Salud reproduce los correos electrónicos que grupo y medio de comunicación se han reproducido antes de la publicación de la noticia. En él se evidencia cómo el periodista pide información a la compañía sobre el conocimiento o no de la Generalitat Valencia sobre la sobre la rentabilidad de B2b. Asimismo, le pregunta si la Administración autonómica “conocía el retorno del dinero en efectivo que se realiza a las cuentas” de esta central de compras, y por qué Ribera Salud, “pudiendo
negociar los precios de los medicamentos con la Generalitat Valenciana, prefieren hacerlo por su cuenta”.
Ribera Salud ha puesto el caso en manos de sus abogados para estudiar la acciones legales pertinentes
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El Español también se cuestiona por qué aumenta de 12 a 77 el
número de trabajadores de B2b; en qué trabajan estos empleados y si la central “factura algún otro concepto, además de la comisión por ventas”, entre otras consultas.
Por su parte, Ribera Salud describe al periodista las características de B2b (no solo es una central de compras, sino también de servicios compartidos, logística y consultoría), además de señalarle que sus “cuentas públicas son públicas y presentadas en el Registro Mercantil, por lo que están a disposición de la Administración y de cualquier persona, entidad u organismo que tenga interés en conocerlo”. Asimismo, le indica que, tal y como establece el pliego de condiciones, “la Administración tiene potestad para solicitar cuanta información requiera del concesionario”, como viene haciendo con la concesionaria sanitaria de Alzira desde 1999.
En un ejercicio más de transparencia, Ribera Salud constata que el
beneficio general después de impuestos por la sociedad B2b en 2015 fue de 1.289.027 euros. “El beneficio obtenido responde a las mejores condiciones en la negociación y, aun sumando este importe al beneficio de la concesión hospitalaria, la cifra está muy lejos del tasado en el 7,5 por ciento de la TIR que marca la cláusula limitativa del contrato”.
Asimismo, y respecto a la posibilidad de negociar o no los precios de los medicamentos con la Generalitat Valenciana, el grupo sanitario privado indica al medio de comunicación que
“podríamos hacerlo, pero no tenemos la obligación de hacerlo”. ¿Por qué? Porque “la flexibilidad de nuestro modelo de gestión, unido a una mayor capacidad para la negociación y la compra, nos permite conseguir mejores condiciones de la industria farmacéutica en la compra de medicamentos y material sanitario, que las obtenidas por la Generalitat Valenciana”. Y es más, añade Ribera Salud, “si la Administración comprara a través de nuestra central de compras, obtendría un ahorro considerable”.
Acceda al comunicado de Ribera Salud
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