El próximo
concierto sanitario de la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (
Muface) contempla una subida en las primas del 5,6 por ciento (con un presupuesto total de 2.191 millones de euros, 114 millones más que años anteriores) y tendrá una duración de dos años. Así lo ha confirmado
Eliseo Moreno, representante de CSI-F en estas negociaciones, a
Redacción Médica, quien explica las principales condiciones que el Gobierno tiene previsto poner encima de la mesa en el próximo Consejo General del martes.
En esta reunión, que estará presidida por la secretaria de Estado de Función Pública,
Elena Collado, se abordará el documento definitivo del próximo convenio de asistencia sanitaria a funcionarios (tanto en España como en el extranjero) para los años 2018 a 2019. “El concierto está prácticamente negociado y esperamos que, además, nos den un avance del presupuesto de la mutualidad para el año que viene”, indica Moreno.
El aumento del 5,6 por ciento en las primas del seguro de salud será igual también para las otras dos mutualidades de funcionarios: la Mutualidad General Judicial (
Mugeju) y el Instituto Social de las Fuerzas Armadas (
Isfas), aseguran estas mismas fuentes sindicales. Sin embargo, la duración de su convenio varía: mientras Muface e Isfas mantendrán un acuerdo con las aseguradoras por dos años, el de Mugeju será de cuatro.
Por parte del sector asegurador, agradecen el “esfuerzo” que ha hecho la Administración (y, en concreto, el director general de Muface,
Antonio Sánchez Díaz) para poder presentar mejores condiciones este año, ya que demuestra, según explica
Luis Mayero, consejero de Asisa y delegado médico de la compañía en Madrid, que
“el Gobierno apuesta por Muface”. Sin embargo, el también presidente del IDIS asegura que esta subida “está lejos de recuperar las primas congeladas” durante la crisis económica, por lo que pide a Hacienda que “siga trabajando” en este modelo que “ayuda a descongestionar a la sanidad pública”.
Este nuevo concierto dará
cobertura a un total de 1.175.787 mutualistas, a los que podrán sumarse unos 100.000 nuevos mutualistas, como consecuencia del acuerdo para la mejora del empleo público firmado con los sindicatos el 29 de marzo y de las ofertas de empleo público, que contribuirán a rejuvenecer la edad medida del colectivo protegido. Los conciertos comprenden dos contratos: uno para la
asistencia sanitaria en territorio nacional, que asciende a más de 2.161 millones de euros; y un segundo, que cubre la asistencia para los 7.400 mutualistas destinados o residentes en el exterior y sus familias, por un importe de unos 30 millones de euros, tal y como ha informado el Gobierno en Consejo de Ministros.
Dos periodos de cambio en lugar de uno
Otra de las novedades de este nuevo convenio sanitario es que se establecen
dos períodos de cambio (enero y junio) para la libre elección de entidad privada. Habitualmente siempre había sido uno, a primeros de año.
Asimismo, el Gobierno ha querido
activar el proyecto de receta electrónica para los mutualistas, que favorecerá el uso racional de los medicamentos y un mejor seguimiento por parte del facultativo, ahorrando tiempo y desplazamiento a los usuarios, además de mejorar los instrumentos de colaboración con los servicios autonómicos de salud que atiendan a los mutualistas en situación de emergencia por activación del teléfono 112, y en la atención rural.
Por otro lado,
Muface incluirá la cirugía robotizada y la radioterapia intraoperatoria como servicios de referencia y creará un sistema de incentivos destinado a favorecer la protección asistencial de los mayores y la oferta de servicios sanitarios por encima de los exigidos en el concierto (bucodental, por ejemplo). También se contempla la ampliación del periodo del período asistencial a recién nacidos hasta el alta hospitalaria y la cobertura de los cuidados paliativos en el domicilio del paciente.
¿Entrada de nuevas compañías?
Tal y como adelantó este mismo medio antes del verano, Muface barajaba si elevar la duración de su concierto en dos o tres años, pero finalmente ha elegido la primera opción para contentar a los sindicatos y para
intentar atraer a más compañías aseguradoras. De hecho, a lo largo de este año, la Dirección General de la mutualidad ha estado en permanente contacto con estas entidades para intentar ‘atraerlas’ y que participen del modelo.
Actualmente,
esta mutualidad tiene firmado su convenio sanitario con SegurCaixa Adeslas, Asisa, DVK Seguros e IMQ , pero la intención de Sánchez Díaz, es contar con el mayor número posible de compañías y, si es posible, que hayan estado antes en las negociaciones (como es el caso de
Sanitas y Mapfre, que se salieron hace unos años por no considerarlo rentable).
De hecho,
en el caso de Sanitas, su consejero delegado,
Iñaki Ereño, aseguró que “no tenía pinta” que la compañía participara este año de los acuerdos con Muface, aunque
sí que lo hace con Mugeju, con la que lleva colaborando desde hace años junto a otras cinco aseguradoras (SegurCaixa Adeslas, Asisa, DVK, Mapfre y Caser).
Aunque Ereño no dio ‘no’ rotundo a volver a participar en el convenio sanitario de Muface (la multinacional estudia cada año los pliegos de condiciones para decidir si postula o no en el concurso), se mostró más partidario a no retornar con la Administración en este sentido. Y no porque, según el consejero delegado,
Muface tiene actualmente “un margen de maniobra muy malo” para las compañías aseguradoras: no hay subidas de primas desde hace años y no se reducen los gastos, por lo que los beneficios para las empresas son muy ajustados.
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