Redacción Madrid
Mapfre sigue sin tener calado en el sector asegurador de salud. La compañía acaba de publicar su cuenta de resultados de 2015 y las primas en este ramo siguen representando una ínfima parte de sus ingresos totales.
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Antonio Huertas Mejias, presidente de Mapfre.
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En concreto, Mapfre cierra el año con 458,1 millones de euros en primas por seguros de salud, lo que no supone ni el 10 por ciento del total de las primas de todos sus productos de aseguramiento (algo más de 4.000 millones de euros). Este resultado evidencia la escasa presencia que tiene en el ramo de Salud la entidad, que no termina de encontrar su hueco en este campo.
A años luz de la líder del sector
En comparación con las principales de aseguradoras del mercado, Mapfre es de las entidades que menos fuerza tiene en este ramo. En los últimos tres años, la compañía solo ha conseguido incrementar su volumen de primas en salud en 59,1 millones de euros. Esta situación contrasta con la líder en este terreno: SegurCaixa Adeslas, que en el mismo periodo vio incrementar su volumen de primas un 63 por ciento, o lo que es lo mismo, 1.141 millones de euros en los últimos tres años.
Pero no solo los resultados de la competencia hacen sonrojar a Antonio Huertas Mejias, presidente de Mapfre. Sus propios vaticinios van camino de desinflarse igualmente. A finales de 2013, la entidad anunciaba a ‘bombo y platillo’ que se proponía a alcanzar los 1,2 millones de asegurados en 2018, tal y como indicó en exclusiva a Redacción Médica su director de Desarrollo de Negocio de Salud, José Manuel Sánchez.
Esto significa que, en algo más de cinco años, Mapfre pretendía incrementar su cartera de asegurados en 500.000 nuevas personas, un pronóstico que no se acerca a día de hoy. Dos años después de esas declaraciones, la compañía solo ha crecido en 70.000 clientes (ahora gestionan la salud de 770.000 asegurados) lo que supone que, de conseguir su ambiciosa meta, Mapfre necesitaría captar a 430.000 clientes nuevos en menos de dos años, casi seis veces más de lo que ha conseguido hasta ahora.
Los datos generales de Mapfre también evidencian su despeño
Por su parte, los resultados generales de la compañía tampoco le dejan en buen lugar a finales de año. El beneficio de Mapfre no solo ha caído un 16,1 por ciento en 2016 (hasta quedar en 709 millones de euros) sino que su patrimonio ha seguido la misma estela y ha cerrado el año con un 9,3 por ciento menos (10.408 millones de euros en total).
Las explicaciones que da Mapfre para estas caídas son, por un lado, “el impacto de las nevadas en Estados Unidos”, que han hecho repuntar la siniestralidad en el negocio de No Vida; y la “bajada en la cartera de inversiones financieras y la depreciación de las principales dividas frente al euro”, por otro.
Asimismo, si se atienden a los principales cuadros de datos consolidados de la aseguradora, se evidencia que 2015 no ha sido un buen año para Mapfre. Respecto a sus resultados, la entidad acaba con un 10,6 por ciento menos en el ramo de Vida; un 15,4 por ciento en el resultado antes de impuestos y socios externos; un 16,1 por ciento en el resultado después de impuestos y socios y en un también 16,1 por ciento menos de beneficio por acción.
El balance, por su parte, también representa datos negativos para la compañía. Sus activos totales caen un 2,9 por ciento; su ahorro gestionado un 7,1 por ciento y sus fondos propios, un 6,3 por ciento.
Por regiones, Mapfre no encuentra calado en Iberia (territorio integrado por España y Portugal). Tanto en primas emitidas y aceptas como en resultados antes de impuestos y socios externos, la aseguradora se descalabra un 2,5 por ciento y un 20,5 por ciento, respectivamente.
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