La
formación de profesionales se revela, para el sector de la provisión sanitaria, como un aspecto clave para poder dar solución al problema de escasez de personal que afecta, de manera estructural, al Sistema Nacional de Salud en su conjunto. Según las previsiones de Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE), en 15 años el
40 por ciento de los especialistas se habrá jubilado, ya que la media de edad del facultativo activo en España es de 50 años, lo que representa un factor añadido al problema de necesidad de profesionales que existe. Actualmente, el 95 por ciento de los hospitales privados tiene
necesidad media-alta de contratación de personal de enfermería y el 58 por ciento la presenta en el caso de personal médico. Además, para 2027, se calcula que harán falta 9.000 médicos anuales en el Sistema Nacional de Salud.
Ante este panorama, ASPE plantea la necesidad de
adoptar medidas flexibles -con una visión a largo plazo en la que se cuente también con las necesidades y aportaciones del sector privado- que redunden en una mayor cantidad de profesionales formados con la que se pueda hacer frente a la alta demanda que existe actualmente y que, previsiblemente, se incrementará en gran medida en los próximos años. "No cabe duda de que, debido al tiempo que requiere
formar a un profesional sanitario con especialidad para trabajar en el SNS, es más que necesaria una planificación de las necesidades de recursos humanos a medio y largo plazo. Según apuntan todos los análisis, esta planificación debería realizarse, al menos, con una perspectiva a diez años", señala Carlos Rus, presidente de ASPE.
Cabe destacar que la
sanidad privada es un sector económico fuerte que empleó a
más de 373.400 profesionales en 2022, siendo la mayor cifra de ocupación desde que hay registros en el ámbito de la sanidad y suponiendo un incremento de la contratación del 36 por ciento con respecto a 2013. A pesar de ello, el sector enfrenta numerosos desafíos que pueden agravarse como consecuencia de esta escasez de profesionales, como el aumento de la esperanza de vida que se traduce en un incremento sensible de las
enfermedades crónicas y que supone más del 80 por ciento del gasto sanitario actual; o el aumento histórico de las listas de espera en el sistema público de salud, que también tiene repercusiones en la privada.
En este sentido, ASPE propone seguir ahondando en la
colaboración público-privada; en el diseño de competencias funcionales; en la adaptación de la norma de incompatibilidad del ejercicio profesional a la realidad actual, que evite las diferencias interpretativas entre Comunidades Autónomas; y en
agilizar los procesos de homologación y flexibilizar los de especialización.
La sanidad privada en la formación MIR
En 2023 se han
ofertado 8.550 plazas MIR, una cifra que aún resulta insuficiente ante la alta demanda de profesionales existente. Por este motivo, ASPE considera que es indispensable la colaboración público-privada en la formación de especialistas y la utilización, en mayor medida, de los hospitales del sector privado.
Actualmente, según datos del
I Informe ASPE, el sector hospitalario privado cuenta solamente con el 3 por ciento de las plazas ofertadas (256), siendo Medicina Interna, Anestesiología y Reanimación y Cirugía Ortopédica y Traumatología las especialidades con un mayor número de plazas ocupadas. De los
432 hospitales privados existentes en nuestro país, 60 de ellos (14 por ciento) cuentan con acreditación docente; Cataluña y Madrid son las comunidades que disponen de un mayor número de hospitales con dicha acreditación.
Fórmulas innovadoras de flexibilidad y buenas prácticas
Por otra parte, y en relación con la formación de especialistas, desde la patronal de la sanidad privada se insta a adoptar nuevas fórmulas innovadoras como, por ejemplo, la re-especialización de médicos. "La experiencia acumulada, así como
la formación continuada, son garantía de que los profesionales que se forman en España tienen la más alta capacitación. Y esto supone una fortaleza para facilitar que los profesionales sean especialistas de varias áreas", afirma el presidente de ASPE.
Además, la sanidad privada hace "un esfuerzo constante" por
captar y retener su talento, en el que la formación continuada tiene un papel protagonista. Mediante acuerdos con universidades y escuelas de formación especializada, los centros hospitalarios ofrecen programas educativos dirigidos a
incrementar las competencias de sus profesionales. Es el caso de IMED Hospitales, que ha llegado a un acuerdo de colaboración con la Universidad Miguel Hernández de Elche para la creación de una
Cátedra de Tecnologías Avanzadas para la rehabilitación, con el objetivo de transferir conocimientos en esta especialidad y compartir oportunidades de investigación entre el hospital y la universidad.
Otro ejemplo lo encontramos en el hospital Quirónsalud Córdoba, cuyos especialistas en Reumatología han impartido una
formación para médicos de Atención Primaria para que estos adquirieran información actualizada útil y práctica. Todas las iniciativas de formación continuada tienen como fin último garantizar la calidad asistencial del conjunto del SNS.
La FP al alza
Según los datos del Ministerio de Educación y Formación Profesional, entre todos los grados de FP (básico, medio y superior) y todas las familias profesionales, el de mayor demanda es el ciclo de
Cuidados Auxiliares de Enfermería. A este respecto, ASPE señala la
conveniencia de regular estudios formativos superiores en Auxiliar de Enfermería que permitan a estos profesionales cubrir un mayor número de funciones en este ámbito.
Conscientes de la importancia de la formación de estos profesionales para paliar la demanda existente, ASPE y el Centro Oficial de Formación Profesional CCC han acordado que los alumnos de CCC que cursan ciclos formativos técnicos relacionados con este sector
puedan hacer prácticas en empresas sanitarias asociadas de ASPE. Este acuerdo, además, permitirá hacer frente a la formación de profesionales técnicos de la sanidad privada en activo para actualizar sus conocimientos y poder reciclarse cursando titulaciones del centro de estudios de FP oficial.
Otro ejemplo de la implicación de las posibilidades que ofrece la FP al sector sanitario es el del Grupo Recoletas Red Hospitalaria, que el pasado junio convocó un Ciclo Formativo de Grado Superior de Formación Profesional en
Técnicos en Diagnóstico Médico por la Imagen y Medicina Nuclear, en la provincia de Ourense, para futuros especialistas en esta rama sanitaria.
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