La privada se siente una víctima de "las políticas sanitarias populistas"

El sector sanitario privado se siente una víctima de las “políticas populistas” que han puesto en marcha algunas regiones en España, tal y como lo ha puesto de manifiesto Cristina Contel, presidenta de la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE), quien ha señalado directamente a tres de ellas: Comunidad Valenciana, Cataluña y Navarra.

Para respaldar su afirmación, Contel ha puesto sobre la mesa los últimos resultados de la ‘Encuesta sobre aspectos de gestión en centros sanitarios privados en España’, donde se evidencia que dos de cada tres clínicas privadas (el 58 por ciento) reconoce que las medidas sanitarias implantadas por algunas regiones les afecta de manera “negativa” (y, en concreto, “muy negativamente” al 31 por ciento de los centros).

Pero la política no es lo único que preocupa a los gestores privados. Para el 40 por ciento, la concentración de su sector les ha afectado negativamente (frente al 27 por ciento que la valora positivamente); mientras que el 68 por ciento de los encuestados consideran que la concentración del sector asegurador más concretamente ha repercutido negativamente a su labor. 

Mínimo histórico en concertación y tarifas

En cuanto a la evolución del volumen de concertación entre la sanidad privada y la pública, el 30 por ciento de los consultados reconocen que lo han reducido (frente al 48 por ciento de 2016; y el 35 por ciento de 2015), principalmente, señala Contel, fruto de la crisis económica y la “reducción drástica de los presupuestos sanitarios”, así como “los cambios políticos, que no favorecen esta colaboración”.

Lo mismo ocurre con las tarifas de la concertación sanitaria. El 16 por ciento de los gestores reconocen que las han reducido (19 punto menos que el año anterior). En la mayoría de los casos, el objeto de los conciertos es para reducir las listas de espera, seguido de pruebas diagnósticas o asistencia general.

“Nos encontramos con el momento más bajo de la concertación y, lejos de que esta tendencia mejore, creemos que se va a estancar”, ha remarcado la presidenta de ASPE. “Por eso, el sector sanitario privado ha puesto su mirada en otros sectores, como el turismo de salud y el paciente internacional”.

Pago a proveedores

La encuesta de ASPE también hace una radiografía del pago a proveedores en sanidad y la antigüedad que tienen las facturas que, actualmente, le adeuda la Administración a las clínicas privadas. A pesar de que hay una tendencia positiva a reducir esos plazos (el 85 por ciento de las facturas se pagan antes de los 30 primeros días, frente al 79 por ciento de 2016), todavía hay un 15 por ciento de centros que cobran por encima del año.

En cuanto al plazo medio de pago, la tendencia también es positiva, explica la organización. Si en 2016, solo el 7 por ciento de los encuestados estaban en plazo legal, ahora la cifra llega al 15 por ciento. No obstante, el 62 por ciento de las clínicas tienen un pago medio de facturas entre uno y tres meses.

A pesar de este panorama, el 65 por ciento de los encuestados asegura que su facturación ha aumentado en el último año (y, de los cuales, el 38 por ciento afirma que la subida ha sido por encima del 5 por ciento), frente al 16 por ciento de los consultados que reconocen que su facturación ha disminuido en el último ejercicio. En cuento a las perspectivas de futuro, el 58 por ciento de las clínicas privadas crecerá en el próximo año. Para conseguirlo, las clínicas quieren potenciar las acciones de marketing, incrementar la diferenciación de su cartera de servicios y fidelizar a los profesionales.