La Comisión Mixta para las Relaciones con el Tribunal de Cuentas ha instado al organismo regulador del gasto público a realizar una auditoría a la Mutualidad General Judicial (Mugeju) y la dependiente del Instituto Social de las Fuerzas Armadas (Isfas) que concrete cuál ha sido, en estos últimos cinco años, el impacto económico de la "deficiente gestión y control administrativos de las Administraciones fiscalizadas en cuanto a las prestaciones farmacéuticas".
Al respecto de las responsabilidades de la Mutualidad General Judicial, la comisión mixta tira de las orejas a Mugeju y les impreta a que remitan por escrito "manuales y protocolos internos, claros y precisos, sobre el procedimiento de gestión y control del cumplimiento de los requisitos de acceso a las prestaciones farmacéuticas, así como de coordinación con las bases de datos con el Instituto Nacional de Seguridad Social y las Administraciones competentes".
También requieren, tanto a Mugeju como a Isfas, que la Mutualidad establezca un control en los talonarios de recetas médicas, y en particular, elimine la práctica de emisión de los mismos en soporte papel.
Por otro lado, y afirmando una falta de agilidad y efectividad a la hora de los pagos, se solicita que suscriban un nuevo marco jurídico de colaboración con el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos "que permita optimizar el control del gasto farmacéutico, así como la mejora del sistema de pago de facturas a los Colegios Oficiales de Farmacia y reduciendo los plazos del proceso de facturación para que ésta resulte más ágil y efectiva".
Reducir el precio y controlar el consumo
También se reclama a la Mutualidad General Judicial que los descuentos -entre el precio de venta al público y el precio de venta de laboratorio- sean efectivos en los medicamentos dispensados a los beneficiarios de Mugeju.
A los dos organismos también se les insta a continuar realizando cruces periódicos de información con otros organismos, y particularmente con el Inss y Muface, a efectos de detectar y corregir posibles duplicidades en los reconocimientos de prestaciones públicas o en la inclusión de beneficiarios en sus respectivos sistemas.
En lo referente a la gestión y control específico de las prestaciones farmacéuticas a cargo del Instituto Social de las Fuerzas Armadas, ejercicio 2015, se ha acordado contrastar, periódicamente, la base de datos de su colectivo con la Agencia Estatal de Administración Tributaria, para determinar el nivel de ingresos de sus beneficiarios, y con el Instituto Nacional de Seguridad Social para verificar que no están acogidos a otro régimen del Sistema de la Seguridad Social.
Al igual que a los abogados, se solicita impulsar la implantación del sistema de receta médica electrónica, para poder realizar un mayor control sobre los medios prescriptores de los medicamentos, así como sobre la validez y dispensación de las recetas.
Por último, bajo la firma del presidente de la comisión, Eloy Suarez Lamanta, también se llama a Isfas a mejorar los controles para la detección y prevención de consumos excesivos de medicamentos, "con objeto de lograr un uso racional de los mismos y con el fin de comprobar que en la recetas no se dé ninguna de las circunstancias que constituyen causa de su anulación".
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.