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España retrocede poco a poco en el bienestar ocular de sus ciudadanos

Un estudio de Miranza revela que un tercio de la población tiene problemas de vista, pero poco más de la mitad la trata

El oftalmólogo, José Pedro Torralba; la periodista y presentadora del estudio, Esther Vaquero; el oftalmólogo, Aritz Urcola, y el director general de Miranza, Ramón Berra.

09 oct 2024. 13.40H
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La salud ocular es clave para los españoles. Nueve de cada diez personas señalan que es importante cuidar la vista, según una encuesta realizada por el grupo oftalmológico Miranza. No obstante, los cuidados que se aplican no son los óptimos en la mayoría de casos. Y es que el estado de los ojos de los ciudadanos del país apenas obtiene un aprobado. En concreto, el informe presentado puntúa con un 5,20 el bienestar óptico de España, cifra similar a la obtenida en la edición anterior, cuando se llegó al 5,22. Los mayores de 41 años suspenden. 

Los datos recogidos por Miranza en el 'IV Barómetro del Bienestar Ocular' apuntan que el 72 por ciento de los encuestados percibe su salud ocular como 'razonable', mientras que el 35 por ciento indican que es 'buena' o 'excelente'. Asimismo, uno de cada tres españoles tiene síntomas de problemas visuales, entre los que destacan la visión borrosa, la sensibilidad a la luz, la sensación de pérdida de visión, la irritación, picor o escozor y la sequedad en los ojos. 

Por patologías, la miopía es la que más incidencia tiene en la ciudadanía, seguida de cerca por el astigmatismo y la presbicia. Una serie de enfermedades que afectan al día a día de sus afectados, ya que estas les dificultan la realización de tareas como conducir o trabajar. Incluso, en el hecho de socializar, como ha indicado el 25 por ciento de los encuestados, lo que eleva su sensación de inseguridad, frustración, dependencia y vergüenza. "Hay que garantizar los estímulos visuales para paliar los efectos de problemas como la depresión o incluso el avance de males como el Azhéimer", ha destacado el oftalmólogo en Miranza en los centros de San Sebastián y Vitoria, Aritz Urcola, durante la presentación del informe.


Características principales del paciente con problemas de visión


Por norma general, las personas con mala vista acostumbran a tener una serie de características comunes. Según los expertos, una de las singularidades más habituales es padecer estrés. "Se trata de un estado emocional que provoca cambios metabólicos y puede ocasionar alteraciones en la vista", ha indicado Urcola. Es más, este puede derivar en la toma de psicofármacos, causantes de problemas como el ojo seco.

Además de estrés, los afectados suelen llevar una vida sedentaria. El estudio de Miranza ha revelado que el 55 por ciento de los encuestados no tienen un día a día activo, en el que la atención sobre aparatos con pantallas -tanto móvil como ordenador- es una costumbre. "El uso prolongado de pantallas en la actualidad es una amenaza importante para el bienestar ocular", ha resaltado el oftalmólogo en Miranza en los centros de Cádiz y Jerez de la Frontera, Juan Pedro Torralba. Y es que este hábito provoca un aumento de las molestias asociadas al ojo seco o fatiga visual y al incremento de los casos de miopía. 

"El uso prolongado de pantallas es una amenaza importante para el bienestar ocular", ha indicado Torralba


Por otro lado, estos pacientes no creen en la posibilidad de mejorar su visión -más de la mitad de los españoles considera que es inviable evitar la pérdida de capacidades oculares-, no se implican en la mejora de sus hábitos y no acuden a revisiones de la vista de forma periódica, pese a padecer molestias o tener una patología diagnosticada. Asimismo, se trata de individuos que portan gafas o lentillas, las cuales en muchos casos les incomodan. "Muchos se resignan a vivir con dolencias durante toda su vida, pese a haber soluciones a algunos de los problemas que sufren", ha lamentado Urcola. Es más, cerca de la mitad de participantes en el estudio con defectos refractivos o glaucoma dice no haber recibido tratamiento.


¿Cómo mejorar la salud ocular?


Tanto Urcola como Torralba han afirmado que el primer paso para mejorar la visión es adquirir buenos hábitos. Llevar una alimentación saludable, dormir las horas necesarias -incluida la realización de pequeñas siestas-, evitar el sedentarismo o contar con una vida familiar y social activa son fundamentales para gozar de una salud ocular óptima, pese a que más de la mitad de los encuestados no percibe una asociación entre estos factores y su vista. A su vez, intentar limitar el consumo de contenido a través de pantallas. "Yo después de cenar ya no miro el móvil", ha revelado Urcola.

A la vez, los sanitarios en Miranza han abogado por acudir de forma regular al oftalmólogo. Ambos recomiendan ir a consulta al menos una vez al año, especialmente durante la niñez y a partir de los 40 años, momento en el que empiezan a aflorar enfermedades como la presbicia o las cataratas. El objetivo de estas visitas es fomentar la prevención de patologías oculares, el mejor remedio a su parecer contra los problemas de vista y sus derivados, como puede ser el aislamiento o la depresión. "Muchas veces actuamos como psicólogos", ha apuntado Torralba.

"Hay que ir al oftalmólogo una vez al año"


Además, se aconseja solicitar ayuda a otros profesionales del ámbito de la salud para tratar algunos de los efectos de la pérdida de visión. Acudir al psicólogo para mitigar el daño que pueden ocasionar los males mentales unidos a una vista deficiente o trabajar en estrategias que reduzcan los niveles de estrés.

Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.