El
seguro de Salud está viviendo una etapa dorada. Así lo atestiguan los datos que trimestre más trimestre se publican al respecto: el crecimiento sigue imparable, con un volumen de primas durante el primer semestre de 2024 asciende a 6.091 millones de euros, es decir. Además, otro indicador de la buena salud de estos servicios es que
acecha cada vez más de cerca al ‘rey’ de los seguros, el de los coches.
La Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (
Unespa) ha publicado este viernes los datos de la facturación de todas las ramas de seguro de los primeros seis meses del año, a partir de la información recabada por la Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (
ICEA). Si se pone el foco en el de Salud,
de enero de junio generó más de seis millones de euros, lo que supone un 7,37 por ciento más que lo recabado en el mismo periodo del año anterior. Esta rama forma parte de los seguros de no vida, que suman más de 24.000 millones de euros.
Si se desgrana, el
reembolso es la parte que más ha aumentado en la comparación 2022-2023, con un 7,43 por ciento; seguido de la
asistencia sanitaria, que ha experimentado un crecimiento del 7,43 por ciento; el
subsidio, por su parte, ha experimentado una pequeña subida del 0,42 por ciento.
El seguro de Salud cala especialmente en los adultos de 40
El mes pasado, Unespa publicó la
Memoria Social del Seguro 2023 donde se constata el
asentamiento de los datos positivos de este tipo de seguro, que ya alcanza a 12,4 millones de personas en España. Los
adultos de 41 a 50 años son el colectivo donde ‘cala’ más este tipo de servicios, pues casi uno de cada tres cuenta con él (2.411.571 personas). Estas cifras señalan una leve subida respecto al año anterior.
El segundo y tercer grupo de españoles donde más se consume el servicio es de nuevo en los adultos, en esta ocasión de
31 a 40 años y de 51 a 60 años, con un 29,7 en ambos casos.
En cuarto lugar, se encuentran los
jóvenes de 21 a 30 años, con un 27,2 por ciento, lo que se traduce en 1.411.913 personas; el 23,8 por ciento de los
mayores de 61 a 64 por ciento cuentan con ello.
En las franjas de edad de menos de 20 años y más de 65 son donde menos ‘apuestan’ por la
sanidad privada, con un 25,5 por ciento y un 17,4 por ciento, respectivamente,
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