Empresas > Sanidad privada

Competencia aprueba la compra de la Clínica Santa Cristina por Quirónsalud

El grupo se ha comprometido a cumplir un paquete de garantías

José María Marín Quemada, presidente de la CNMC.

24 abr 2019. 16.40H
SE LEE EN 3 minutos
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha acordado la aprobación de la adquisición por parte de Helios Healthcare Spain (Grupo Quirón) del negocio sanitario de la Clínica Santa Cristina (CSC) en Albacete.

"Esta decisión se ha adoptado tras una intensa investigación en segunda fase y va a acompañada de un paquete completo de compromisos dirigidos a mejorar la calidad en la prestación privada de servicios médicos; evitar el encarecimiento de precios y garantizar el acceso de competidores en los hospitales de Quirón. Su cumplimiento se vigilará durante 5 años", señalan desde Competencia.

Con esta adquisición "desaparece el único competidor privado del Grupo Quirón en la provincia, por lo que tendrá el monopolio en la prestación privada de servicios sanitarios con internamiento. Por esta razón, la CNMC ha realizado una investigación a fondo y tras sucesivas propuestas ha aceptado un paquete de compromisos dirigidos a evitar todos los riesgos y efectos adversos sobre la competencia identificados. La CNMC vigilará el cumplimiento de estas garantías, que Grupo Quirón no podrá modificar sin previa autorización, hasta 2024".

Condiciones de la adquisición


Quirónsalud se ha comprometido a evitar el encarecimiento de precios y a garantizar el acceso de competidores

Este paquete de compromisos está dirigidos a "mejorar la calidad en la prestación privada de servicios médicos; garantizar el acceso de competidores en servicios médicos en los espacios hospitalarios del Grupo Quirón y mantener la relación con los existentes. Además, se preservará la atención que se presta en la actualidad a los pacientes de la sanidad pública para evitar colapsarla o empeorarla; y se promoverán nuevas especialidades y mejoras en la gestión. Por último, Quirón se compromete a una vigilancia anual de los precios para evitar un encarecimiento de la colaboración con el sector público y con el sector privado".  

Para ello, la CNMC realizó un primer test de mercado dirigido a conocer la opinión de competidores, aseguradores, administraciones públicas y otros agentes afectados por la operación. En octubre acordó el paso de la operación a “segunda fase”, con el objetivo de realizar un análisis en profundidad de los posibles efectos adversos para la competencia derivados de la operación.

En enero, la Dirección de Competencia elaboró un pliego de concreción de hechos en el que se identificaron tres posibles problemas de competencia:  reducción de la calidad (incluida la reducción de especialidades y de especialistas), incremento de los precios y problemas de acceso. Dichas cuestiones se identificaron en tres mercados: la prestación privada de servicios sanitarios a pacientes privados con internamiento, la prestación privada de servicios sanitarios a pacientes derivados de la sanidad pública y el mercado de alquiler y cesión de espacios con internamiento (fundamentalmente, quirófanos).

Esto llevó al Grupo Quirón a presentar los primeros compromisos para intentar resolver dichos problemas, que fueron rechazados por considerarse insuficientes. Posteriormente, se han presentado varias propuestas adicionales que se han vuelto a someter a sucesivos test de mercado entre sus competidores. Hasta que finalmente se ha elaborado un paquete completo de garantías que se han considerado suficientes para evitar los problemas de competencia detectados cuando se notificó la operación.

Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.