"La política se olvida de la sanidad privada en el tema de las agresiones"

Las agresiones en sanidad privada siguen siendo minoritarias en comparación con las que se producen en la pública. Sin embargo, que las agresiones a sanitarios en este sector hayan alcanzado una cifra récord en 2018, según datos de la Organización Médica Colegial (OMC), llegando a ser el 15 por ciento de las totales es un síntoma preocupante. En este sentido, el secretario general de la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE), Carlos Rus, considera que "los políticos se olvidan de la sanidad privada en el tema agresiones". 

"Ningún partido político se ha interesado nunca en llevar hacer autoridad al médico de la privada"

Según Rus, "el pólitico olvida que gobierna también para el ámbito privado, no solo el público. Nosotros reclamamos que desde hace años que los médicos de la sanidad privada sean considerados autoridad, como ocurre con los de la púlbica. De hecho, hay muchos facultativos que trabajan por el día en la pública y por la tarde en la privada. No tiene sentido que estos profesionales dejen de ser considerados autoridad por la tarde y vuelvan a serlo por la mañana". La OMC se ha sumado a esta petición y la ha incluido en su manifiesto contra las agresiones.

En 2015, el Congreso de los Diputados aprobó la modificación del Código Penal que reconocía como delito de atentado las agresiones que sufran los médicos de la sanidad pública en el ejercicio de su cargo. Esta novedad, sin embargo, no se trasladó al sector privado, que lleva años reclamando que las agresiones a los médicos de la sanidad privada tengan la misma consideración legal, algo para lo que sería necesario enmendar el Código Penal, como apuntan los expertos.

Silencio de los políticos

"No entiendo que este cambio no se lleve a cabo. Ningún partido político se ha interesado nunca en llevarlo a cabo y me temo que es por el carácter mediático que tendría una medida así", defiende el secretario general de ASPE. 

Por otra parte, Rus defiende que una de las causas del aumento de las agresiones, "aunque una agresión nunca tiene justificación", son "el incremento de las listas de espera en el sector público. Nosostros tenemos la mano tendida a la pública para mejorar los tiempos de espera, disponemos de medios suficientes para ser ese apoyo complementario para reducir las listas de espera". 

En cuanto a la figura del interlocutor policial, ASPE considera que "es una buena medida, pero a la vez una señal preocupante que denota que nuestra sociedad tiene un problema de calado profundo".