Pediatría es una de las especialidades
más "amplias" que existen dentro de la Medicina debido a la
diversidad de patologías que se tratan y los
modos de abordaje para cada una de ellas. Pero no solo por las enfermedades, sino también por las diferentes
situaciones vitales en las que se encuentran los pacientes, ya que no es lo mismo atender a un neonato que a un adolescente de 17 años.
Elvira Reneses es residente de tercer año de
Pediatría en el Hospital
Puerta de Hierro de Majadahonda. Para ella, su especialidad es una mezcla de
Medicina Interna y, a su vez, de
Familia, pero dedicada plenamente
a los niños. "Abarcamos pacientes desde los 0 hasta los 16-18 años, dependiendo el centro y el área", ha explicado a
Redacción Médica.
Para esta médica, el principal
aspecto positivo que tiene su disciplina sanitaria es la posibilidad de "trabajar con niños". "Son pacientes
muy agradecidos. Es verdad que pueden ponerse muy graves, pero, generalmente, enseguida
tienen una buena respuesta. Los ves jugar con muchísima facilidad incluso cuando están graves o con una enfermedad importante", ha indicado.
Dentro de esta especialidad, trabajar con pacientes de tan corta edad también está ligado a la importancia de
comunicarse con sus padres y familiares. Esto tiene una parte positiva, según afirma Reneses, ya que tienen la posibilidad de
ayudar, de una forma cercana, no solo a los niños, sino también a las familias.
Aspectos positivos de hacer el MIR en Pediatría
"Los pacientes, principalmente a cierta edad, como con 12 años, tienen
poca capacidad de decisión sobre sí mismos, e incluso de comunicación con nosotros. Y trabajar con las familias en este aspecto nos ayuda mucho. Y, aunque a veces puede llegar a ser utópico, intentarmos enseñar a los niños, desde bien pequeños,
buenos hábitos", ha explicado.
Con el objetivo de continuar despejando las dudas de los aspirantes sobre esta especialidad, ahora que están eligiendo plaza en los
actos de asignación MIR 2024, esta futura especialista ha explicado que en Pediatría existe la posibilidad de ir a otros hospitales durante la residencia a “
completar su formación”. "De esta forma, conocemos los
puntos de vista de más especialistas y de cómo manejan a los pacientes. Esto creo que, para un residente que viene nuevo, es una
información valiosa", ha subrayado.
¿Qué es lo peor de hacer el MIR en Pediatría?
Como en todas las demás especialidades, no solo hay aspectos positivos, también están
los negativos, y uno de ellos está relacionado con el
tiempo de formación MIR que hay en su especialidad. Para ella, cuatro años "
pueden quedarse escasos" para estudiar todas las patologías pediátricas que existen y, por este motivo, cree que se podría "
ampliar alguno más".
Otro de los puntos negativos que ha resaltado está relacionado con las
subespecialidades pediátricas. Y es que esta R3 de Pediatría ha lamentado que, a pesar del tiempo y formación que se invierta en ellas, "
no siempre están reconocidas".
El fallecimiento de un paciente siendo MIR de Pediatría
Asimismo y aunque, generalmente, es "poco frecuente", enfrentarse a pacientes graves o incluso
a la muerte de un niño puede ser un golpe "
emocionalmente duro" para los médicos durante su formación, por lo que Reneses también lo ha considerado un aspecto negativo a tener en cuenta antes de entrar a esta rama.
Para concluir, ha querido mencionar la situación de las
guardias de 24 horas en su especialidad. Aunque depende del área en donde estén trabajando, cuando
llega otoño e invierno "son peor", ya que los niños acuden más a los hospitales y se vuelven "
más cansadas". "Pero, al fin y al cabo, son necesarias", ha finalizado.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.