Un estudio ha evaluado las
comorbilidades asociadas a los
nacimientos prematuros (menos de 37 semanas de gestación). Este tipo de nacimientos están asociados a posibles complicaciones a lo largo de la vida. Sin embargo hasta ahora no se había analizado esta cuestión con profundidad y ahora se ha demostrado que solo los casos extremadamente prematuros conllevan un mayor riesgo.
Así, un estudio de cohorte nacional ha analizado la prevalencia de las
2.566.699 personas nacidas en Suecia entre el
1 de enero de 1973 y el 31 de diciembre de 1997, con datos de edad gestacional. Así, se ha evaluado la
supervivencia y
comorbilidades asociadas de estos individuos hasta el 31 de diciembre de 2015, es decir, individuos nacidos con partos prematuros que actualmente cuentan con edades comprendidas entre los
18 y los 43 años.
"La mayoría de prematuros sobrevivió hasta la edad adulta temprana o media sin grandes comorbilidades"
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"Entre las personas nacidas prematuramente en Suecia entre 1973 y 1997, la mayoría sobrevivió hasta la edad adulta temprana o media sin grandes comorbilidades. Sin embargo, los resultados fueron peores para los nacidos extremadamente prematuros", señalan las conclusiones del estudio, publicado en la revista científica
JAMA.
Tal como reconocen los investigadores, "el parto prematuro se ha asociado con un
mayor riesgo relativo de trastornos cardiometabólicos,
respiratorios y
neuropsiquiátricos en la edad adulta". "Sin embargo, hasta donde sabemos, la prevalencia de buena salud en esta población
nunca se ha examinado sistemáticamente y sigue siendo desconocida".
Supervivencia sin comorbilidades
Por esa razón, los investigadores se habían propuesto "determinar la prevalencia de supervivencia sin comorbilidades importantes en la edad adulta entre las
personas nacidas prematuras frente a los embarazos que llegan a término".
Así, se utilizó el 'Comorbidity Index' del estudio Adolescent and Young Adult Health Outcomes and Patient Experience (AYA HOPE), para concluir que "de todas las personas nacidas prematuras, el
54,6 por ciento estaba vivo sin comorbilidades del AYA HOPE al final del seguimiento. Estratificado aún más, esta prevalencia fue del
22,3 por ciento para los nacidos
extremadamente prematuros, (entre 22 y 27 semanas de gestación); 48,5 por ciento para los muy prematuros (28-33), 58 por ciento para los prematuros tardíos (34-36 semanas), 61,2 por ciento para el término temprano (37-38) y 63 por ciento para el término completo (39-41 semanas de gestación)".
De esta forma, los investigadores han desmentido esta creencia y han arrojado luz sobre las patologías asociadas a los nacimientos prematuros.
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