La
natalidad en
España ha caído durante el
primer semestre de 2022 a unos mínimos históricos, registrando un total de
159.705 nacimientos según datos publicados por el
Instituto Nacional de Estadística (INE). Estos datos apremian a una necesaria 'reforma' del
Sistema Nacional de Salud (SNS), que pasa por reestructurar las especialidades de
Pediatría y
Ginecología, estrechamente ligadas a este aspecto. La falta de nacimientos en España es analizada en
Redacción Médica por especialistas en
Pediatría, la
Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) y la
Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), coincidiendo en que se trata de un
problema social más allá del estrictamente sanitario y que los principales autores para modificar esta situación son el
Gobierno y las
Comunidades Autónomas, promoviendo
políticas natalistas.
La reducción de nacimiento va ligada, según
Pilar Rodríguez Ledo, vicepresidenta primera de SEMG, a “varias
circunstancias, como es el hecho de que actualmente las parejas
tienen hijos con mayor edad. Las propias especialidades se están adaptando a esta mayor demanda de atención sanitaria vinculada al parto. Desde el punto de vista sanitario se deben
readaptar los recursos para paliar esta situación. Si
cada vez hay más muertes y menos nacimientos en un país envejecido como el nuestro tenemos un problema”.
Por lo que respecta a la forma en que se debe realizar esta
adaptación sanitaria, Ledo considera que “una parte depende de los
profesionales, que siempre procuran adaptarse a las
necesidades científicas y técnicas de nuestra propia especialidad. La otra adaptación debe ser llevada a cabo por la
Administración sanitaria y política. Se debe adaptar la realidad de los recursos humanos a las previsiones estimadas en el futuro más inmediato y a largo plazo de las demandas sociales. Esta adaptación es la que menos ha mejorado, debido a que la Administración es lenta y torpe”.
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Ledo: "Si hay más muertes y menos nacimientos en un país envejecido como el nuestro tenemos un problema"
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El
recambio generacional en varias especialidades es otro de los aspectos que los especialistas ponen sobre la mesa.
José Polo, presidente de Semergen, considera que “habría que evaluar si los servicios de
Pediatría y
Ginecología deben ser reestructurados o reconvertidos para
adaptarse a esta realidad. La principal cuestión es que no estamos hablando solamente de un problema sanitario, sino que, como ciudadano, se trata de una
cuestión social".
Menos niños y menos pediatras en España
Borja Bernando, jefe de Servicio de Pediatría del Hospital Carmen y Severo Ochoa, sigue la estela de Polo y afirma que “aunque pueda sonar paradójico, cada vez
nacen menos niños y cada vez hay
menos pediatras. Se están jubilando muchos profesionales de forma abundante y no hay reemplazo, debido a que
las promociones de residentes que salen
son insuficientes y no cubren el número de especialistas totales. En el futuro puede haber una falta de organización a la hora de confeccionar las plantillas”.
Pese a que los nacimientos en España se han reducido notablemente,
Guillermo Martín, vicepresidente de Atención Primaria de la
Asociación Española de Pediatría (AEP), afirma que “cada vez hay
más población inmigrante y se mantiene la natalidad. Eso significa que sigue habiendo niños que necesitan atención pediátrica. En principio creemos que sigue siendo necesarios los pediatras tanto en Atención Primaria como en el resto de las especialidades que se desarrollan a nivel hospitalario”.
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Bernardo: "La solución para este problema no la tienen los pediatras, ya que es un tema social"
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El
déficit de pediatras en España afecta, en palabras de Martín, “a prácticamente
todas las comunidades autónomas. En Madrid hay un tercio de las plazas que están sin cubrir o cubiertas por no pediatras dentro de Atención Primaria. En otras comunidades
suelen faltar pediatras sobre todo en las zonas rurales, alejadas de los grandes núcleos. Hay que
aumentar el número de plazas de formación MIR y poner condiciones laborales adecuadas. Se están facilitando los turnos deslizantes y en las zonas distantes se debería valorar a nivel económico y a nivel de puntuación a la hora de posiciones y traslados”.
La solución que propone Bernardo ante esta situación en España es la de
fomentar políticas sociales de promoción de natalidad, tal y como realizan diferentes países europeos: “Somos muy parecidos a Francia y allí se dobla la natalidad que hay en España. La solución para este problema no la tienen los pediatras, ya que es un problema social y la situación económica no ayuda. Los políticos no son conscientes de esta situación y la base de la
pirámide de población cada vez es más delgada”.
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