El Vall d'Hebrón y su rotación libre 'se lleva' al cuarto mejor MIR de 2024

El hecho de contar con un hospital infantil propio convierte al Vall d’Hebrón en uno de los centros con más capacidad a nivel español de formar a residentes de Pediatría. A este gran pilar de conocimiento se le ha añadido otro desde hace año y medio, como es la confección de un HUB exclusivo en Pediatría dentro del Vall d'Hebrón Instituto de Investigación (VHIR). Desde el hospital infantil se recuerda que este HUB “define acciones formativas e incentivará la investigación pediátrica. Los residentes serán un integrante más de los equipos de investigación, dándoles una oportunidad a todos ellos”.

El residente que logró situarse en la cuarta posición del ránking MIR 2024 decidió realizar el MIR en el Hospital Vall d’Hebrón y este escenario representa para César Ruiz, presidente de la Subcomisión de Docencia de Pediatría, “todo un orgullo. El hospital infantil se dedica en cuerpo y alma a intentar que la docencia de los residentes tenga la máxima calidad. En los últimos años se han hecho muchas cosas para mejorar la docencia a nivel de tutores, a nivel de programa formativo, sesiones formativas trasversales, etc.”. Para el especialista, haber conseguido que la primera plaza de Pediatría aterrice en el Vall d’Hebrón significa “una pequeña recompensa a todo el esfuerzo realizado”.

Ruiz expone que el hecho de contar con otros residentes con números no tan brillantes no supone ninguna preocupación, ya que “la brillantez no se concreta con un número de MIR, eso solo sirve para entrar. Se tratará por igual a todos los residentes y no va a haber ningún trato de favor ni expectativas distintas. Todos tendrán el mismo programa formativo y las exigencias iguales a la hora de ser evaluados”.

"La brillantez no se concreta con un número de MIR, eso solo sirve para entrar"

Uno de los puntos fuertes del Servicio de Pediatría es, en palabras del especialista, que el programa formativo “incluye rotar por todas las especialidades, por lo que es absolutamente homogéneo para todos los residentes. El último año MIR es totalmente libre, por lo que el residente puede mejorar áreas que considera que tiene flojas, centrarse en únicamente una especialidad, etc”.

La investigación entre los residentes, asignatura pendiente de Pediatría

Dentro del centro existe una Subcomisión de Docencia de Pediatría, encargada de “velar para que todos los residentes tengan las condiciones para conseguir los objetivos formativos en cada una de las especialidades, además de resolver los conflictos que pudieran surgir”. Por otra parte, el pediatra afirma que el hecho de ser muchos residentes y el buen ambiente que se respira entre ellos "permite a los MIR tener mucha más versatilidad, realizar cambios de guardias, etc., logrando tener la oportunidad de conectar con mucha gente diferente a lo largo de la residencia”.

Históricamente y tal y como reafirma Ruiz, la investigación dentro de los residentes de Pediatría “siempre ha sido uno de sus talones de Aquiles. Debido a ello, el Vall d’Hebrón abrió el Institut de Recerca, en el que existen equipos pediátricos muy potentes. La creación de un HUB de Pediatría ha permitido que todos los equipos de investigación del VHIR formados por pediatras se hayan unido en un único grupo”.

"El HUB de Pediatría ha permitido que todos los equipos del VHIR formados por pediatras se hayan unido en un único grupo"

El hecho de sumar a los residentes a los equipos de investigación permite que “todos aquellos que tengan inquietudes por investigar puedan satisfacerla, dándoles una oportunidad a todos ellos”. Además, el pediatra asegura que “el cuarto residente con mejor nota en el MIR “quiere ser genetista, por lo que la investigación es uno de los temas que más le interesan”. Para el especialista, el “ADN de los pediatras y del hospital infantil del Vall d'Hebrón es único, ejerciendo en todo momento la medicina personalizada en cada paciente, ya que nunca hay dos de iguales”.