Unidas Podemos ha allanado el camino para que la
Ley de Equidad supere su primera tramitación en el Congreso de los Diputados. La formación morada ha llegado a un acuerdo in extremis con el Partido Socialista para votar este jueves en contra de las enmiendas a la totalidad presentadas por varios grupos de la oposición. Sin embargo, el socio minoritario se reserva la nueva fase de negociación parlamentaria para seguir intentando introducir
“límites” a los conciertos con entidades privadas.
“Hemos acordado que durante la tramitación parlamentaria
vamos a intentar negociar posibles modificaciones de la Ley de Equidad para que se establezcan límites a la privatización de la sanidad pública”, ha apuntado el portavoz del grupo,
Pablo Echenique, tras reunirse con la ministra de Sanidad, Carolina Darias, y los representantes de la bancada socialista.
Unidas Podemos había planteado hasta
once enmiendas particulares a la nueva ley para tratar de acotar las situaciones en las que la administración puede recurrir a los servicios de la privada. Limitar los conciertos a
un año de duración y bajo “urgente necesidad”, vetar las contrataciones con empresas que tengan en plantilla a
personal sanitario de la pública o fijar unos ratios comunes eran algunas de sus grandes apuestas.
La formación morada, que llevaba meses advirtiendo sobre su rechazo a la norma, ha facilitado finalmente su continuidad pero ha anunciado que no renuncia a su hoja de ruta. “Esperamos que durante el trámite parlamentario,
nuestras reivindicaciones, que son las de la mayoría de sindicatos y movimientos de la sanidad pública se puedan llevar a la ley”, ha agregado Echenique en los pasillos del Congreso.
La Ley de Equidad, en manos de los socios de investidura
El voto del socio minoritario se antojaba esencial, teniendo en cuenta que formaciones como Ciudadanos, Vox, Junts o el PDeCAT ya han solicitado la devolución del texto, lo que habría dejado al grupo socialista
en manos del Partido Popular para alcanzar la mayoría suficiente para que la norma no quedase rechazada a las primeras de cambio
A pesar del visto bueno de Unidas Podemos, ahora la coalición de Gobierno también tendrá que armar apoyos entre sus socios habituales de investidura, algo que ya están negociando de cara a la votación del jueves. “Somos conscientes de las mayorías de esta cámara y por lo tanto también
vamos a hablar con Esquerra, con Bildu y con el PDeCAT para que eso se pueda hacer de una manera que estos grupos puedan aceptar “, ha agregado Echenique.
El portavoz de la formación morada ha mantenido su “compromiso” de que se seguirán tratando los temas que han quedado en el aire. Entre sus propuestas, también figuran otra serie de enmiendas dirigidas a los aspectos de universalidad de la sanidad como la inclusión de todos los
menores, mujeres embarazadas, apátridas o personas con enfermedades crónicas dentro del listado de ciudadanos con derecho a protección de la salud en España.
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