El
Congreso de los Diputados debatirá nuevas medidas para acabar con la
brecha digital que salpica a los mayores también en el ámbito sanitario. El grupo del Partido Popular ha registrado una proposición no de ley en la
Comisión de Sanidad para instar al Gobierno a “
evitar el aislamiento” de este colectivo en un momento marcado por el proceso de digitalización del Sistema Nacional de Salud (SNS).
El principal partido de la oposición tratará de sumar apoyos en la Cámara Baja para forzar al Ministerio de Sanidad a que ponga en marcha acciones para
capacitar a las personas de la tercera edad en competencias digitales, así como asegurarse un acceso “completo, ágil y equitativo” a todos los
servicios asistenciales y sus respectivas prestaciones.
La iniciativa, firmada por los diputados
Ana Pastor, José Ignacio Echániz y Elvira Velasco, incorpora un apartado en el que se reclama la dedicación de todos los “recursos humanos, económicos y materiales” necesarios por parte de la administración pública para poner en práctica con “inmediatez” este plan. Por eso, solicita que se invierta en esta estrategia una parte de la inyección económica de los
fondos europeos de recuperación tras la pandemia de Covid-19.
El 49% de los mayores tiene problemas con sus citas médicas
El grupo popular ha justificado su iniciativa parlamentaria con los datos recabados en un sondeo publicado por
Metroscopia el pasado 11 de febrero. La encuesta detectó las dificultades de las personas de más de 65 años para realizar gestiones en la administración pública mediante herramientas digitales o aplicaciones online. El
49 por ciento de los consultados admitió problemas para solicitar sus
citas médicas.
La PNL ha recogido también las reclamaciones que planteó en enero el
Foro Español de Pacientes, que envío una carta al Ministerio de Sanidad para alertar sobre la “brecha digital” que se había generado en este colectivo demográfico. “Las personas mayores han perdido la forma de acceso a la sanidad que utilizaban habitualmente”, rezaba la misiva. Sobre la mesa, se puso la situación de
9,3 millones de ciudadanos de más de 65 años.
Entre las medidas planteadas, se ha reivindicado que se ofrezcan
alternativas a los cauces digitales como ofrecer por escrito la información sobre los tratamientos o facilitar un acceso telefónico complementario. La reclamación ha puesto el foco especialmente en las personas mayores que sufren algún tipo de
discapacidad visual o los que viven en las
zonas rurales, ya que disponen de una escasa conectividad a internet.
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