Médicos y enfermeras coinciden en
pedir un control "exhaustivo" del servicio del transporte sanitario, especialmente el no urgente, antes de debatir sobre una
posible internalización de este servicio en Cataluña. El presidente del Consell de Col·legis de Metges,
Josep Vilaplana, ha manifestado que se deben establecer "
indicadores claros, índices de satisfacción entre trabajadores y usuarios y un
análisis del coste a corto, medio y largo plazo de la internalización", en una comparecencia en la proposición de ley para la internalización del transporte sanitario en el Parlament.
En esa misma idea ha coincidido la tesorera del Consell de Col·legis d’Infermeres i Infermers de Catalunya,
Elena Gil, que ha remarcado que cualquier medida
"debe tener a la persona y su máximo bienestar en el centro", así como actuar en base a objetivos y resultados. Gil ha realizado una radiografía del sector del transporte sanitario urgente y no urgente en Cataluña y también ha repasado las diferentes iniciativas para
internalizar el transporte sanitario en varias comunidades autónomas como Navarra, Cantabria y País Vasco, además de Cataluña, al igual que las regiones que ya han dado ese paso, como Baleares y La Rioja,
"a quienes tenemos que escuchar", planteando así sus dudas sobre un posicionamiento de imitar esta medida.
"Es imprescindible que Salut y el Servei Català de la Salut
apliquen los mecanismos de control para garantizar que el transporte sanitario cumple los máximos de lo establecido en la ley", ha comentado, además de poner en valor que "para tener cuidado de las personas
hay que tener cuidado de los profesionales".
Vilaplana ha defendido que el transporte sanitario presenta unos
"números relativamente buenos", aunque es "mejorable". En ese sentido, ha aludido a "priorizar" en sanidad, ya que existe un
"déficit e infrafinanciación crónica que no debemos olvidar". "La Administración debe tener un buen control del servicio, de la calidad de asistencia, velar para que se cumpla y
hacer valer las condiciones de las concesiones", ha manifestado.
Por todo ello ha abogado por
"hacerlo de la mejor forma posible con el dinero que tenemos". Sobre esa cuestión ha sostenido que sería bueno que se hiciera un estudio sobre la situación actual, quejas y objetivos que no se han cumplido. Gil también ha instado a los parlamentarios a crear comisiones que ayuden a mejorar la asistencia y que los servicios reviertan en la salud de los usuarios.
Los parlamentarios coinciden en el control
Los diputados presentes en la sala han coincidido con los comparecientes en la importancia de los mecanismos de control, que
"no están claros ni son homogéneos", ha relatado
Mario García, en representación del grupo parlamentario de Socialistes i Units per Avançar. También
Carlos Castillo, de ERC, ha recalcado que se debe "
estudiar bien el sistema y los posibles costes para ver que no nos estamos tirando al vacío".
Por su parte,
Jordi Fàbrega, de Junts, ha mencionado la auditoría que apunta que la internalización en Baleares ha supuesto un
sobrecoste entre el 50 y 54 por ciento, un hecho que también ha querido exponer la diputada
María Elisa García, de Vox.
Por último, la diputada de la CUP -grupo parlamentario que ha impulsado la proposición-
Laia Estrada ha rememorado las reivindicaciones de los diferentes sindicatos que ya han comparecido en esta comisión para resaltar que "ha quedado acreditado que
las empresas no están prestando un buen servicio", ha asegurado.
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