La brecha autonómica PP-Vox deja en el aire 21.000 millones para la sanidad

Los gobiernos autonómicos de coalición PP-Vox se rompieron el pasado julio, en medio de discrepancias por la gestión relacionada a temas de política migratoria. La negociación de los presupuestos 2025 será el primer obstáculo que enfrenten las regiones lideradas por los populares, ahora que no cuentan con mayoría para sacar adelante todas las propuestas, entre ellas, las relacionadas a la sanidad. Y es que sólo las comunidades en cuestión como Extremadura, Castilla y León, Aragón, Murcia, la Comunidad Valenciana y Baleares tuvieron una asignación económica que supera los 21.000 millones de euros para mejorar los servicios de salud durante el 2024, cifra que esperan mantener o superar para el próximo curso, afianzando sus sistemas autonómicos. 

En conversación con Redacción Médica, representantes del Partido Popular de Extremadura y Aragón han coincidido en que el proceso de negociación para llegar a acuerdos que finalicen con la aprobación de los presupuestos del próximo año, necesitará de mucho diálogo y trabajo, que no incluya "líneas rojas" de parte del partido liderado por Santiago Abascal. Aunque desde este último han preferido no entrar en muchos detalles, la defensa de su programa de salud será un objetivo claro, en el destacan propuestas como la reforma del mapa sanitario, el refuerzo de las inversiones y la protección de la vida.

Colaboración y propuestas

"Habrá más fondos destinados a toda la materia social, sanitaria, educación, dependencia, pero también es cierto que aún no hemos aterrizado ese presupuesto, ni por áreas ni por materia, de cuáles pueden ser las cuantías económicas destinadas a cada uno de ellos", ha dicho a Redacción Médica el diputado José Ángel Sánchez, portavoz del Partido Popular en Extremadura, tras mantener un encuentro con la Consejería de Hacienda y Administración de la Junta. Además, ha destacado que "hay una apuesta muy fuerte por incrementar esa calidad sanitaria que tiene que ir acompañada de recursos".

En cuanto al proceso de negociación para acordar un presupuesto que cuente con la aprobación necesaria, el diputado popular ha indicado que esperan que "todos los grupos manifiesten cuáles son las propuestas que quieren incorporar", para lo cual están pidiendo "mucha altura de mira, que no se pongan líneas rojas y que no haya veto de unos grupos a otros" que impidan que estos salgan adelante.

Presupuesto realista en Aragón

Las negociaciones en Aragón están centradas en presentar un proyecto de presupuestos 2025 que sea "realista y que dé respuesta a las necesidades" de los aragoneses. En ese sentido, desde el Gobierno están enfocados en reforzar los servicios públicos, la sanidad, la educación y el bienestar social, así como "impulsar proyectos transformadores" que sitúen a la región en la vanguardia del empleo y las inversiones, según han detallado a este periódico.

Para lograrlo, hará falta "diálogo, negociación y trabajo". Los populares han señalado que esto se está aplicando desde el Gobierno, "que ya tuvo su reflejo en el presupuesto de 2024, que contó con el respaldo de cuatro fuerzas parlamentarias: PP, Vox, Partido Aragonés y Aragón Existe". Así, han resaltado que la mejora de la sanidad seguirá siendo una realidad y que confían no sólo en la responsabilidad de Vox, sino en la de todas las agrupaciones parlamentarias, para sacar adelante los presupuestos.

Defensa del programa de Vox

Aunque desde los gobiernos autonómicos populares hay confianza en que se podrá llegar a acuerdos, Vox centrará sus esfuerzos en defender su programa de salud. El diputado Santiago Morón, portavoz de Vox en la Comisión de Sanidad de las Cortes de Aragón, ha resaltado que el acuerdo de gobernabilidad en temas sanitarios se desarrolló "de una forma aceptable"; sin embargo, ahora atenderán aspectos relacionados a poner énfasis en la adopción de incentivos reales para atraer personal a centros de difícil cobertura, la reforma del mapa sanitario, el refuerzo de las inversiones y, a su vez, una mayor eficiencia en la compra de material sanitario. Además, la mejora de los consultorios locales y de la atención en salud mental, la garantía del derecho de objeción de los profesionales sanitarios, la mejora de su seguridad en los centros de atención sanitaria y la defensa de la vida.

Mientras tanto, en las Islas Baleares el enfoque estará en las reivindicaciones del idioma, es decir, la eliminación del requisito de catalán "para darle más importancia a los conocimientos sanitarios y a la experiencia". Entre otros puntos están reducir las listas de espera, tener mayores recursos para la salud mental y la mejora de las infraestructuras hospitalarias.