Los grupos parlamentarios del
Congreso están llamados a acordar, dentro de una semana, los pormenores del dictamen sobre el
Proyecto de Ley de la Agencia Estatal de Salud Pública. Es el último paso previo antes de su debate en el pleno de la Cámara Baja. Salvo cambios de última hora, será el próximo jueves, 13 de marzo, cuando, según ha podido saber
Redacción Médica, se celebre la pertinente
Comisión de Sanidad. De los acuerdos que se adopten en la incorporación de enmiendas al texto embrionario dependerá la redacción normativa que se someterá a votación en el hemiciclo, previsiblemente de aquí a dos semanas.
A finales de febrero, los partidos aprobaron el informe de la ponencia en torno a la
propuesta legislativa para crear la Agencia de Salud Pública. El acuerdo llegó cinco meses después del cierre el plazo para registrar enmiendas al proyecto elaborado desde el Ministerio de Sanidad. Las fuentes de la negociación consultadas por este periódico ya resaltaron entonces que, si bien había voluntad general de consenso, aún quedaba por pactar algunos retoques del articulado.
Desde entonces, los grupos han seguido manteniendo reuniones en pos de un acuerdo que contente a todas las partes. Esa era la voluntad de los responsables de Sanidad una vez que el proyecto salió del ministerio y empezó a tramitarse en las Cortes. Este mismo jueves ha habido un encuentro al respecto entre representantes de, al menos,
PP y
Sumar. “Todo está muy atado ya, o eso esperamos”, aseguran voces parlamentarias.
La idea, al menos desde el socio de Gobierno del
PSOE, es que, cuando el texto normativo se vote en el pleno del Congreso, el panel del hemiciclo "se llene de luces verdes", por lo que en Sumar aclaran que también tienen previsto levantar el cordón sanitario a
Vox y sentarse a dialogar con los de Santiago Abascal. “Esta ley lo amerita”, remarcan desde el grupo plurinacional. Por su parte, en el PP mantienen su discurso de prudencia y, consultados por este medio, insisten en que al texto acordado en el informe de la ponencia se incorporarán enmiendas “que aún están viéndose”.
Enmiendas a la Ley de Agencia de Salud Pública
Entre las principales aportaciones de los partidos se encuentra la incorporación de
datos de la sanidad privada en los sistemas de vigilancia, además de la inclusión de determinantes sociales de la salud en los mecanismos preventivos, según pretenden PSOE y Sumar. En cuanto al PP, plantea que el Congreso y el Senado puedan
ratificar el nombramiento de la persona designada para dirigir la Agencia. En el caso de
PNV y
Junts, abogan por que las funciones atribuidas al futuro órgano estatal de Salud Pública no pervierta las competencias en sanidad del País Vasco y Cataluña.
Si, una vez sellado el dictamen del proyecto de ley en la Comisión de Sanidad, el pleno del Congreso aprobara la normativa, el Senado podría proponer su veto o la incorporación de enmiendas. En caso de que lo hiciera, la Cámara Baja habría de decidir si ratifica o no la decisión de la Cámara Alta. Si no hubiera veto ni enmienda del Senado o sí las hubiese pero el Congreso las rechazara, la norma se publicaría en el Boletín Oficial de Estado (
BOE) y entraría en vigor.
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