La
Comisión Europea ha decidido registrar una Iniciativa Ciudadana Europea (ICE) titulada
'Llamamiento para lograr un entorno libre de tabaco y la primera generación europea libre de tabaco para 2030'. Los organizadores de la iniciativa piden a la Comisión que proponga legislación para evitar que las
nuevas generaciones caigan en la adicción al tabaco, para actuar contra los peligros ambientales relacionados y contra el tabaquismo.
Más concretamente, piden a la Comisión que proponga actos jurídicos para
poner fin a la venta de tabaco y productos de nicotina a ciudadanos nacidos a partir de 2010. La iniciativa también pide medidas específicas para conseguir playas y riberas libres de tabaco y colillas, crear una red europea de parques nacionales
libres de tabaco y colillas, ampliar los espacios exteriores libres de vapor.
Dado que esta Iniciativa Ciudadana Europea cumple las condiciones formales, la Comisión considera que es
legalmente admisible. La Comisión no ha analizado el fondo de la propuesta en esta fase.
La decisión de registro es de carácter legal y no prejuzga las conclusiones jurídicas y políticas finales de la Comisión sobre esta iniciativa y las acciones que se proponga tomar, si las hubiere, en caso de que la iniciativa obtenga el apoyo necesario. El contenido de la iniciativa
solo expresa los puntos de vista del grupo de organizadores, y de ninguna manera puede considerarse que refleja los puntos de vista de la Comisión.
Próximos pasos contra el tabaquismo
Tras el registro, los organizadores tienen
seis meses para abrir la colección de firmas. Si una Iniciativa Ciudadana Europea recibe unmillón de declaraciones de apoyo en el plazo de un año, de al menos siete Estados miembros diferentes, la Comisión tendrá que reaccionar. La Comisión
podrá decidir si lleva adelante la solicitud o no, y estará obligada a explicar su motivación.
La Iniciativa Ciudadana Europea se introdujo con el
Tratado de Lisboa como una herramienta de establecimiento de agenda en manos de los ciudadanos. Se lanzó oficialmente en abril de 2012. Una vez registrada formalmente, una Iniciativa Ciudadana Europea permite que un millón de ciudadanos de al menos siete Estados miembros de la UE inviten a la Comisión Europea a proponer actos jurídicos en áreas en las que tiene el poder de actuar.
Las
condiciones de admisibilidad son: la acción propuesta no se encuentra manifiestamente fuera del marco de las facultades de la Comisión para presentar una propuesta de acto jurídico; no es manifiestamente abusiva, frívola o vejatoria; y no es manifiestamente contraria a los valores de la Unión.
Desde el comienzo de la ICE, la Comisión ha recibido 118 solicitudes para lanzar una Iniciativa Ciudadana Europea,
91 de las cuales fueron admisibles y, por lo tanto, cualificadas para ser registradas.
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